Por Victor Hernández
Se quejó ayer Andrés Manuel López Obrador del Poder Judicial luego de que un juez dictaminara que Emilio Lozoya puede seguir su proceso por corrupción desde casa. Que porque, dijo, “todos los casos los perdemos”.
El Presidente se está haciendo afuera de la bacinica. No es por culpa del Poder Judicial que está perdiendo casos como el de Lozoya, Rosario Robles, Juan Collado, etc. Fue el propio AMLO quien dejó que se cayeran los casos.
Fue AMLO quien dejó que se cayeran los casos porque puso a un fiscal incompetente—Alejandro Gertz Manero—a investigar y presentar argumentos ante el Poder Judicial. Fue la FGR de Gertz Manero quien presentó mal los alegatos, dándole pie al Poder Judicial para fallar en contra de la FGR.
Hasta sospechoso resulta que Gertz Manero sea tan incompetente. Uno tiene que cuestionarse seriamente si se le cayeron todos los casos de verdad por incompetente o por plan con maña para darle impunidad al peñismo-salinismo.
Ahora bien, múltiples veces se le dijo a AMLO que quitara a Gertz Manero y pusiera a otro fiscal, se le advirtió de la incompetencia de Gertz, de sus trácalas y se sus actuar con fines vindicativos para temas personales. Pero AMLO no quiso hacer caso. Por consiguiente, si se cayeron los casos de la FGR contra corruptos es porque el Peje lo permitió al no poner a un fiscal competente y al permitir que la misma gente a la que se le cayeran los casos en la FGR sigan ahí.
“¡NOSIERTO! ¡Ezdeke el Poder Judicial no aplica criterios de justicia!” dirán en la 4T. Pero la realidad es que, nos guste o no, el Poder Judicial tiene la obligación de hacer valer lo que dice la ley. Y si en el debido proceso de un caso no se sigue lo que dice la ley, el caso se cae aunque el procesado sea claramente corrupto.
En otras palabras, el juez no puede ser juez y parte. Es la Fiscalía la que tiene que asegurarse de que sus casos sean sólidos, no los jueces. De lo contrario ¿para qué tener una fiscalía si el juez es el que va a hacer el trabajo?
Entiendo que a AMLO le están sirviendo los malos manejos de los casos que lleva la FGR para abogar por una reforma al poder judicial para que los jueces sean electos por voto popular. Pero mientras tanto el peñismo-salnismo queda impune. Y eso, insisto, no es culpa del Poder Judicial. Es responsabilidad exclusiva de Andrés Manuel López Obrador por poner a un incompetente en la FGR.
PD: Se quejó AMLO en una entrevista muy blandita—que más bien era una mañanera con preguntas cómodas—de que la Suprema Corte declaró inconstitucional la reforma eléctrica a pesar de que fue aprobada por el Senado y por la Cámara de Diputados. Pues sí. Se llama división de poderes y pesos y contrapesos. El Congreso no puede aprobar leyes que contravengan la Constitución. Puede reformar la Constitución, pero no contravenirla. ¿Estoy de acuerdo en que la SCJN haya invalidado la reforma eléctrica? No. Pero tampoco estoy de acuerdo en que AMLO pretenda que la SCJN no tenga el poder para corregirle la plana al Congreso si votan algo que contraviene la Constitución sólo porque se aprobó por mayoría. En ese caso no se podrían denunciar por inconstitucionales las reformas privatizadoras del PRIAN. Más bien AMLO debe ser más cuidadoso con la gente a la que pone a hacer las leyes que quiere que se aprueben para que la derecha no las pueda tirar con alegatos leguleyos.
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