Por Victor Hernández
Sabina Berman entrevistó a los conocidos lustradores de calzado de la 4T como Paco Ignacio Taibo, El Fisgón y Vicente Serrano y les preguntó, con otras palabras, por qué aceptar a los chapulines de derecha en la 4T.
Se hicieron bolas, hicieron ensalada verbal, y trataron de decir que "bueno, es que hay ejemplos de conservadores que se pasaron al lado liberal e hicieron buen papel", Berman les preguntón "¿cómo quién?" Silencio y risitas incómodas y al final El Fisgón sólo pudo decir, bueno por ejemplo Andrés Manuel López Obrador.
Ajá. Entonces según estos lambegüevos Lilly Téllez y Germán Martínez son como el Peje. Rommel Pacheco, quien votó contra las reformas de AMLO, es como AMLO.
Como eso no era suficiente, entonces El Fisgón nombra a Manuel Bartlett, a quien ya de plano purificó pese a su negro historial y medio se trató de justificar diciendo "bueno, siempre habrá traiciones como Lilly Téllez y Germán Martínez". Ajá. Y si siempre han habido traiciones ¿por qué arriesgarse? De los tres PRIANistas que mencionó El Fisgón (Bartlett, Téllez, Martínez) dos traicionaron. Eso quiere decir que sólo 33% no traicionó. Es una manera completamente ineficiente--e idiota--de operar políticamente, ya que de pilón se perdieron dos senadurías que se ganaron con votos para Morena.
¿Estos son los "genios" que tiene la 4T?
Lo que siguió fue peor. Sabina Berman le pregunta a Javier Serrano por qué si antes tachaba al panista Rommel Pacheco de "traidor a la patria" por votar contra las reformas de AMLO, ahora lo acepta en la 4T. Serrano sólo alcanza a balbucear "es que ya no es" traidor.
¡Puta madre! ¿Tienen mierda en la cabeza estos cabrones o qué chingados?
¿Creen que somos idiotas para tragarnos esa mamada? ¡Denme dos explicaciones que justifiquen esa tomada de pelo!
Ajá. Pacheco dejó de ser traidor nomás porque fue a lambisconearle a Claudia Sheinbaum para que le dieran candidatura de gobernador. ¿Y el enorme daño que le hizo a México al votar contra la reforma eléctrica no cuenta? ¡No pinches mamen!
Qué lamentable es ver al Fisgón y a Taibo--de Vicente Serrano no me extraña--bajándose los chones para lustrarle el calzado a Morena con los chapulines de derecha. De verdad duele verlos convertidos en lamebotas no de un movimiento, nisiquiera de un ideal político o social, sino de una burocracia electorera.
El lambisconearle a una burocracia electorera no va a llevar a nada bueno. Va a acabar con la buena fe que la gente depositó en el lopezobradorismo y va a terminar alejando a los votantes. Todo por huesos, contratos de publicidad y clicks.
Aquí la entrevista completa. Que cada quien juzgue el calibre de lambisconería de estos güeyes:
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