Por Victor Hernández
La revista Etcétera publicó que el gobierno de Claudia Sheinbaum pagó más de 6.3 millones de pesos a Martha Debayle en 5 años de gobierno. La revista lo hizo de mala leche y por joder, pero los contratos son imposibles de negar.
Pero eso no es lo peor. Usuarios de Twitter encontraron que de esos 6 millones en chayote, más de 1 millón de pesos correspondió al período en el que Debayle entrevistó a Claudia Sheinbaum para anunciar su boda, frivolidad con la cual Claudia pretendía lanzar su campaña electoral como Enrique Peña Nieto lo hiciera años antes.
Inmediatamente el gobierno de la Ciudad de México negó que se tratara de un pago por la entrevista. No sólo eso; Jenaro Villamil, coordinador federal de medios del estado mexicano, se puso a defender a Claudia como si fuera vocero de su campaña, violando la ley al entrometerse en asuntos electorales.
Pero las negaciones oficiales fallaron. Usuarios de Twitter encontraron que no sólo coincidían las fechas del contrato con el período en el que se dio la entrevista frívola, sino que además el sitio de internet de Martha Debayle, bbmundo.com, no tenía las visitas como para justificar un millón de pesos para poner banners. Lo más que podía recibir de acuerdo con los tabuladores del gobierno de la Ciudad de México era 21 mil pesos mensuales.
Los datos de visitas de bbmundo.com indican que apenas tienen 93 mil visitas al mes, de las cuales 67.52% se van de inmediato, mientras que la duración promedio de cada visita es de apenas 1:44 minutos.
¿Cómo se puede justificar darle un millón de pesos al año a un sitio con tan poco tráfico? Lo único que se puede extrapolar de esta información es que el dinero no era para banners, sino que se disfrazó de dinero para banners cuando en realidad era para pagar por la entrevista frívola que le hizo Martha Debayle a Claudia Sheinbaum usando dinero del pueblo.
Sobra decir que Martha Debayle ha sido una rabiosa antipejista por años. Pero aún así Claudia Sheinbaum le dio millones de pesos del erario para ver si así apuntalaba su imagen.
Y en el gobierno de la Ciudad de México lo podrán negar todo lo que quieran, pero los contratos y los datos ahí están, evidenciando que Claudia Sheinbaum no tiene inconveniente en fortalecer a la derecha siempre y cuando le convenga a ella. Qué vergüenza.
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