Por Victor Hernández
Pidió Andrés Manuel López Obrador en la conferencia mañanera que el candidato del PT a gobernador de Coahuila, Ricardo Mejía, que no use su nombre en campaña porque no tiene relación con él.
Desde luego AMLO está en su derecho de pedir que Mejía no use su nombre. Pero al hacerlo da a entender que a quien apoya es al candidato de Morena, Don Perpetuo del Rosal--digo--Armando Guadiana, quien cuenta con un amplio rechazo de mucha gente en Morena.
¿Para qué se quema así el Presidente?
Que conste: No estoy diciendo que Mejía sea buena opción. Al final en política si no te tocó la candidatura, pues no te tocó y buscas la candidatura nuevamente para la que sigue. Y tampoco estoy diciendo que Guadiana sea buena opción. De hecho fue de las peores opciones que pudieron poner en Morena para la candidatura de Coahuila. Tan es así que por eso van a perder.
Pero en el momento en el que AMLO le pide a uno que no lo mencione, en vez de pedírselo a los dos, la forma se convierte en fondo y la lectura entre líneas es que su gallo es Guadiana.
Insisto: ¿Para qué se quema así el Presidente?
Porque al final si Guadiana pierde, como todas las encuestas indican que ocurrirá, dirán en Coahuila que fue por la necedad de AMLO en vez de enfocarse en los malos manejos de Morena.
Sí, el 4 de junio lo que le va a importar a los medios será Edomex. Pero si el PRI retiene Coahuila por haber puesto de candidato a Don Perpetuo del Rosal, entonces habrá otro moreirazo para seguir financiando las fechorías de la derecha.
Y eso es algo que Morena nunca debió haber permitido.
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