Por Victor Hernández
El empleado de Televisa Jorge Ramos pretendió hacerse el indignado por el hecho de que grabaron a consejales latinos en Los Angeles haciendo comentarios racistas.
Pero cuando en la derecha en México ha usado lenguaje racista y discriminatorio en la derecha, Jorge Ramos nunca ha dicho nada.
Las expresiones racistas y discriminatorias abundan en la derecha en México. Desde la idiotez de "chairo", pasando por "naco" e "indio" y las múltiples expresiones de discriminación en base a ingreso que usan en la derecha, por mencionar sólo algunos de los epítetos que usa la derecha, particularmente contra los que apoyamos a Andrés Manuel López Obrador.
No sólo eso. Uno de los patrones de Jorge Ramos, Televisa, mantuvo una cultura del racismo al contratar sólo a actores y comentaristas de noticias de tez blanca, como si la gente de tez morena y facciones indígenas no existieran en México o como si ser prieto fuera algo malo.
Pero de eso Jorge Ramos jamás se quejó. Nunca. Prefirió callar a cambio de dinero.
¿Quiere decir que Jorge Ramos no debería quejarse de los consejales que hicieron comentarios racistas en Los Angeles? No. El racismo se debe rechazar siempre. Lo que quiere decir es que Jorge Ramos es un HIPÓCRITA y no es quien para darle lecciones de tolerancia y diversidad a NADIE.
Porque al final Ramos defiende los mismos intereses de la derecha en México que han usado al racismo y a la discriminación como armas durante siglos. Y no lo va a dejar de hacer. ¿Por qué? Porque Televisa y Reforma le pagan bien.
Lo cual sugiere que para Jorge Ramos es más importante el dinero que la diversidad. Y su queja contra el racismo, por lo tanto, queda en calidad de teatro para que crean en Estados Unidos que los intereses que la pagan a Ramos no son racistas.
Uuuuh.... Si supieran en Estados Unidos el tipo de racismo y disriminación que han fomentado los medios "latinos" durante años. Definitivamente es hora de que se enteren.
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