Por Victor Hernández
La semana pasada se armó un poco de ruido en redes sociales debido a que supuestamente Cinemex y Cinépolis están en riesgo de cerrar salas de cine por la pandemia de Covid.
Obviamente la derecha pretendió culpar a Andrés Manuel López Obrador por el supuesto cierre de salas de Cinemex y Cinépolis. Pero lo que no dijo la derecha es que los dueños de Cinemex y Cinépolis podrían rescatar a las salas de cine subsidiándolas con su propio dinero, pero no han querido.
Mire usted:
Cinépolis es propiedad de lo que solía ser Organizaciones Ramírez. Pero los cines no son su único negocio. También tienen negocios inmobiliarios.
De acuerdo con un sitio especializado en el mercado inmobiliario, el negocio inmobiliario de los dueños de Cinépolis, llamado CITELIS, opera centros comerciales, hoteles, fraccionamientos residenciales, agencias de autos, edificios de oficinas y recintos de espectáculos.
Así que pobrecitos no están. Bien podrían subsidiar a las salas de cine de sus ganancias del negocio inmobiliario. Pero al parecer no han querido.
En el caso de Cinemex, el dueño es Grupo México, de Germán Larrea, uno de los empresarios más ricos de México. Grupo México, entre otras cosas, opera minas (la mina de Pasta de Conchos es de Grupo México) y transporte de carga. También podría subsidiar con ganancias de sus otros negocios a sus salas de cine para que no cierren. Pero al parecer no han querido.
¿Por qué debería rescatarlos el gobierno si los cines son propiedad de millonarios que podrían subsidiar a los cines de sus ganancias de otros negocios? ¿Por qué tendríamos que rescatarlos con nuestros impuestos?
Ahora bien, al final las salas de cine van a dejar de ser negocio debido a la manera en la que está evolucionando la tecnología de streaming.
Lo digo porque en diciembre pasado la revista The Hollywood Reporter, especializada en la industria del espectáculo de Hollywood, publicó la siguiente caricatura en su portada:
La caricatura hace referencia a la película Mujer Maravilla 1984, de Warner Brothers, uno de los tres principales estudios de cine de Estados Unidos (los otros dos son Disney y Paramount). Warner Brother decidió no estrenar la película en salas de cine de Estados Unidos debido a la pandemia de Covid-19 y mejor estrenarla en su plataforma de streaming HOB Max. Esto, de acuerdo con la caricatura, "aplastaría" a las salas de cine de Estados Unidos que ya de por sí están en problemas por la pandemia.
Encima de eso, Warner Brothers anunció que estrenaría todas sus películas de 2021 simultáneamente en salas de cine y en streaming, algo que los propietarios de salas de cine no quieren que pase porque se van a quedar sin clientes.
Pero a los estudios de cine las salas de cine no son negocio. El nogocio que ven hoy y a futuro es el streaming. Pueden hacer más dinero cobrando una mensualidad por contenidos de streaming y no le tienen que dar una tajada a nadie.
Eso quiere decir que inclusive sin pandemia, las salas de cine ya tienen sus días contados. Es cuestión de tiempo para que todos los productores de cine se muden a streaming y las salas de cine sean cosa del pasado.
¿Cuándo va a pasar? Yo le doy 10 años. Le hubiera dado 15 años en 2919 pero la pandemia de covid aceleró las cosas.
¿Qué van a hacer Cinemex y Cinépolis cuando eso pase? Pues berrinche porque no tendrán pretexto para culpar al gobierno de algo que es el resultado de, oh ironía, el libre mercado.
Si los dueños de Cinépolis y Cinemex quiere conservar por lo menos una porción de su negocio, lo único que pueden hacer es NO VERSE OJETES y pagar de su propio bolsillo para subsidiar a las salas de cine y a sus trabajadores. Dinero tienen. Lo que al parecer no tienen es ganas.
Si los dueños de Cinépolis y Cinemex subsidian a sus cines con el dinero de sus otros negocios, entonces cuando llegue el tiempo habrá buena voluntad del público para adaptarse a una nueva modalidad de consumo de contenido.
Tal vez el modelo de negocios de las salas de cine ya no será cobrar por ver una película, sino por comida y bebidas. Las salas de cine se podrían convertir en restaurantes en los cuales se puede ver una película de estreno gratis. Así quienes no quieran ver la película de estreno en su celular, pueden ir a una sala a verla. en pantalla grande, pero pagando por el trato VIP.
Así que la próxima vez que algún derechango les salga con que va a quebrar Cinemex o Cinépolis por culpa del manejo de la pandemia por el gobierno, la respuesta es sencilla: Los dueños de los cines tienen minas y negocios inmobiliarios. Pueden subsidiar a los cines de sus otros negocios sin pedirle nada al gobierno. ¿Por qué no lo hacen? ¿No que mucho libre mercado?
PD: Cinemex y Cinépolis no son las únicas cadenas de cine en problemas. En Estados Unidos la cadena de cines AMC, que es la más grande de Estados Unidos, también está en riesgo de quiebra por el Covid. Pero para 2022, cuando esté vacunado todo el mundo en Estados Unidos tal vez sea muy tarde para que las salas de cine se recuperen, ya que para ese entonces el streaming será más fuerte. No es otra cosa más que la evolución del mercado como resultado de la tecnología.
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