Por Victor Hernández
Este fin de semana el gobierno de la Ciudad de México retiró la estatua de Cristobal Colón de Paseo de la Reforma, una de las avenidas más emblemáticas de la ciudad.
Oficialmente la razón es porque iban a darle mantenimiento a la estatua. No les creo. Más bien la quitaron porque era lo correcto, pero buscaron alguna excusa para no hacer polémica.
Al margen, quitar la estatua de Colón fue lo correcto. Colón fue un genocida, esclavista, tratante de blancas y de menores, además de ladrón, torturador y explotador de las personas indígenas que lo recibieron con cortesía y hospitalidad en este continente.
Razón por la cual la estatua de Colón NO debe regresar a Paseo de la Reforma. Debe colocarse en algún museo con una explicación contextualizada y COMPLETA de quién fue Colón y las atrocidades que hizo, para que las generaciones futuras en México sepan de dónde salió la cultura que hoy tienen y eviten ser hijputas como lo fueron Colón, Hernán Cortés y otros por el estilo.
Porque la realidad es que los mexicanos no pueden seguir poniendo en un pedestal al colonialismo. Sí, México hoy en día es el producto del colonialismo, pero no tenemos por qué festejarlo. Más bien tenemos que buscar la manera de que nunca más vuelva a ocurrir.
Hoy 12 de octubre NO es el día de "la raza" ni el de Colón. Hoy es el día del colonialismo. Debemos recordarlo, pero nunca festejarlo. Y mucho menos permitir que alguien pretenda imponerlo en cualquiera de sus modalidades.
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