domingo, 20 de septiembre de 2020
Vean: Esto es lo que pasa en EU con la muerte de la ministro Ruth Bader Gingsburg
Por Victor Hernández
El viernes pasado falleció la ministro de la Suprema Corte de Estados Unidos Ruth Bader Gingsburg. Esta columna es para dar información sobre lo que esto significa para Estados Unidos y para las elecciones presidenciales en ese país, ya que las cosas van a complicarse como resultado de su fallecimiento.
Ginsburg era uno de los 4 ministros de tendencia liberal en la Suprema Corte de Estados Unidos. Los otros 5 ministros, todos hombres, son Republicanos. Es decir, de derecha.
Las decisiones de la Suprema Corte de Estados Unidos suelen ser partidistas para temas realmente importantes. Por ejemplo; el recuento de votos de la elección de 2000 se detuvo luego de que la Suprema Corte de EU ordenara frenarlo con los 5 votos conservadores. Eso benefició a George W. Bush y perjudicó a Al Gore, quien tenía la mayoría del voto popular.
En EU el cargo de ministro de la Suprema Corte es vitalicio. Los ministros son cambiados hasta que se mueren o hasta que se retiran. Se les puede someter a juicio político también, pero las probabilidades de quitarlos con juicio político son diminutas ya que se requiere de dos tercios del congreso para removerlos del cargo, y ni los Demócratas ni los Republicanos han podido tener esa mayoría en décadas.
El presidente en turno es el que propone a un nuevo ministro al Senado y el Senado es el que lo ratifica, usualmente con voto partidista. Si el presidente es Republicano, y los Republicanos tienen el control del Senado, entonces usualmente aprueban a su nominado sin problema. Así fue como Trump logró que le aprobaran a dos ministros de extrema derecha en la Suprema Corte. Uno para reemplazar al ultraderechista Antonin Scalia meses después de que murió, y otro para reemplazar a Anthony Kennedy cuando anunció su retiro de la corte.
El reemplazo de Kennedy, Brett Kavanaugh, fue todo un caso, ya que lo acusaron de haber abusado sexualmente a una mujer cuando estaba en la universidad y de ser un borracho. Pero los Republicanos lo aprobaron de todos modos porque tienen la mayoría en el Senado.
Esto quiere decir que técnicamente Trump podría nominar a otro ultraderechista para la Suprema Corte, garantizando de esa forma 6 ministros conservadores, lo cual pone en peligro derechos sociales en Estados Unidos como el derecho al aborto y el derecho al voto.
Pero hay un detalle; Cuando murió Antonin Scalia, faltaba medio año para las elecciones. En ese entonces Barack Obama era presidente y los Republicanos tenían la mayoría en el Senado, así que los Republicanos bloquearon la confirmación del nominado de Obama, Merrick Garland, alegando que no era ético confirmar a un ministro en año electoral, y que la gente debería decidir con su voto al Senado que confirmará al ministro.
Pero ahora son los Republicanos los que podrían nominar y confirmar a un ministro en año electoral. Si fueran consistentes con sus propios dichos, no lo harían hasta después de que tome protesta el siguiente presidente. Pero no; como son uno shipócritas, ahora pretenden confirmar a un nuevo ministro ya sea antes de las elecciones presidenciales o antes la toma de protesta.
El detalle es que si confirmar a un nuevo ministro antes de las elecciones, un montón de senadores Republicanos perderán la reelección al ser vistos como mentirosos. Así que políticamente lo que les conviene es esperar hasta después de la elección pero antes de la toma de protesta.
Pero hay un problema: Trump quiere que confirmen a su nuevo ministro YA. Antes de las elecciones.
¿Por qué quiere eso Trump? Porque cree que de esa manera podrá presumir que puso a tres ministros en la Suprema Corte de EU, y que además "sus" ministros lo protegerán en caso de que lo lleven a juicio por las fechorías que ha cometido.
¿Qué va a pasar? Hay 3 posibles escenarios:
1. Los Republicanos confirman a un nuevo ministro de ultraderecha entes de las elecciones. Si eso pasa, los votantes Demócratas van a enfurecer y van a votar de manera masiva contra los Republicanos tanto en la presidencia como en las dos cámaras del congreso. Los Republicanos controlarían a la Suprema Corte, pero perderían la presidencia y el congreso. Además, sin el control del congreso, los Demócratas podrían llevar a juicio político a Brett Kavanaugh, quien tiene acusaciones pendientes de actos indebidos como juez, o podrían expander a la Suprema Corte de EU para que tenga más ministros y de esa manera nivelar la balanza.
2. Los Republicanos confirman a un nuevo ministro de ultraderecha después de las elecciones pero antes de la toma de protesta en enero de 2021. Este es el escenario más probable, ya que entonces los Republicanos podrían usar a la vancancia en la Suprema Corte como tema de campaña para tratar de mantener la mayoría en el Senado. De esa manera podrían perder la presidencia, que es lo más probable que ocurra, pero mantendrían el control de la Suprema Corte y del Senado.
3. Los Republicanos declinan confirmar a un nuevo ministro y permiten que se haga hasta que quien gane las elecciones de Noviembre nomine a un nuevo ministro. Esta opción es la menos probable ya que entonces corren el riesgo de perder la presidencia, el Senado, y de tener dos tercios del control de la Suprema Corte.
Ahora bien, ¿por qué es importante que la izquierda en EU vea esto con seriedad? Porque 6 ministros de derecha (2 tercios del total) en la Suprema Corte significa que prácticamente no hay manera de evitar decisiones de la corte que vayan en contra de derechos civiles.
Peor aún; 1 de los 3 ministros liberales de la Suprema Corte tiene 82 años, Stephen Breyer. Gingsbug tenía 87 años. Eso quiere decir que si Trump es reelecto (poco probable) y Breyer se enferma o lo pasa algo, Trump puede poner a otro ministro deultraderecha y darle una apabullante mayoría de 7 contra 2 a la derecha.
En el caso de los Republicanos, sus ministros más viejos tienen 70 y 72 años. Eso quiere decir que para poner el balance a la izquierda en la Suprema Corte de EU, los izquierdistas, ya sea progresistas o moderados, tendrían que elegir a presidentes y congresos Demócratas por los siguientes 12 años, que es cuando los ministros de derecha más viejos estarían en edad de retirarse o podrían empezar a tener problemas de salud.
Esto quiere decir lo siguiente:
1. Si los Republicanos nominan a un ministro de derecha antes la toma de protesta, los Demócratas tendrán forzosamente que asegurarse de que los presidentes y la mayoría en el congreso sean Demócratas durante los siguientes 12 años. Sea quien sea el candidato. Nada de abstenerse porque el candidato no tiene la pureza política que les gustaría que tuviera.
2. Si durante esos 12 años se retiran o fallecen los dos ministros de derecha más viejos, y los gobiernos son Demócratas, la balanza de la corte gira la izquierda con 5 ministros Demócratas y 4 Republicanos.
Así que si aún hay ultraizquierdistas en EU que no quieren votar por Biden porque querían que Bernie Sanders fuera el candidato, van a tener que apechugar y votar por Biden o corren el riesgo de perder no sólo la presidencia y el congreso, sino otro ministro más de la Suprema Corte en los siguientes 4 años dada la edad de Stephen Breyer.
Sirva entonces esta situación en EU para que las izquierdas en todo el mundo, incluyendo la izquierda en México, se de cuenta de que no siempre se puede tener pureza pólítica y, de hecho, hay veces en las que la decisión correcta es el pragmatismo.
En otras palabras, hay veces en las que para ganar la guerra hay que perder algunas batallas. La alternativa es perderlo todo.
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