Ayer la senadora suplente priista Nancy Sánchez, suplente de la también priista Vanessa Rubio, quien dejara su cargo para salir huyendo del país, dio el chaquetazo y chapulineó a la bancada de Morena.
Pero a diferencia de cuando la también chapulín panista Lilly Téllez se fue al PAN, esta vez los fans de la 4T no dijeron nada. No hubo escándalo. No hubo trending topic. Cero.
Lo cual es una enorme hipocresía. Por esto:
Para empezar, Nancy Sánchez es exáctamente lo mismo que Lilly Téllez; una derechista que se suma a las filas de Morena por conveniencia. No por convicción.
En segundo lugar, no hay garantía de que dentro de año y medio, como lo hizo Lilly Téllez, Nancy Sánchez se vaya al PAN, o de regreso al PRI. Estamos hablando de gente de que chapulinea por conveniencia, insisto.
¿Por qué no se está quejando entonces la 4T de que Morena está dejando entrar a más derechistas a sus filas siendo que haberlo hecho ya fue causa de traiciones en Morena?
Lo vimos con Lilly Téllez y con Gabriela Cuevas. Y entonces sí hubo gran escándalo y berrinche por parte de los borregofans de Morena.
Pero con que una derechista brinque alas filas de Morena no tienen problema.
Que no se quejen entonces si Sánchez luego les hace lo mismo que les hizo Lilly Téllez.
Ah, y por cierto: quien orquestó este chapulineo fue el principal priista en Morena; Ricardo Monreal, quien sólo se hace pasar por izquierdista, cuando en realidad es un ambicioso vulgar que ningún problema tuvo en coquetear con el PRIAN cuando no le dieron la candidatura a Jefe de Gobierno del DF por CULERO.
Pero los borregofans de Morena lo siguen tolerando. Bueno, que no se quejen después de sus chingaderas.
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