De acuerdo con El Universal, el gobierno de Andrés Manuel López Obrador va a gastar un montón de dinero en medios para difundir una campaña contra la comida chatarra.
Esto a pesar de que otras campañas que ha hecho el gobierno federal contra las drogas y contra la violencia familiar fueron completamente ignoradas y hasta criticadas por el público.
En este caso la campaña que pretende hacer AMLO no funcionará. Por esto:
PRIMERO: porque no ha existido jamás una sola campaña de medios que haya podido reducir el consumo de chatarra.
Son varias las razones por las cuales no han funcionado las campañas de medios contra la chatarra. Entre ellas:
1. Porque por cada anuncio del gobierno hay 20 anuncios de chatarra. El mensaje simplemente se diluye.
2. Porque además de anuncios en medios, TODAS las tienditas de la esquina muestran de manera prominente productos chatarra, lo cual equivale a tener anuncios en todos lados a todas horas. Es lo que se conoce en el mundo del marketing como "impresión", que es la cantidad de veces que alguien ve un mensaje. Nisiquiera se le tiene que decir al público que compre. Lo hacen porque ven que el producto está disponible.
3. Porque el marketing de la chatarra no se basa en convencimiento, sino en normalidad. Coca-Cola, por ejemplo, no convence a nadie de que sabe mejor. Su publicidad va encaminada a hacer a su producto parte indeleble de la cultura de todos los países del mundo. La gente no toma Coca-Cola porque le guste, sino porque lo ven como tradicional. ¿Hay una comida con amigos o familiares? Traigan Coca-Cola. ¿Hay una boda? Traigan Coca-Cola. ¿Hay un cumpleaños? Traigan Coca-Cola. Nisiquiera se pregunta la gente por qué lo hace. Es una reacción automática generada por años de consumo "porque así se hace." Lo mismo con todos los demás productos chatarra. Nadie consume chatarra porque le guste, sino por costumbre.
(Se esto porque yo me dedico a hacer marketing. Se todos los trucos del marketing y se la manera en la que el marketing de las grandes empresas no busca convencer, sino CONFORMAR.)
NADIE, absolutamente NADIE en el equipo de AMLO, en ninguna de las dependencias del gobierno federal sabe de marketing. Ni las empresas que contrata para hacer propaganda saben cómo se hace de manera correcta. Lo se porque he visto las campañas que han hecho y han sido un estrepitoso fracaso.
Así que, de entrada, una campaña de publicidad contra la chatarra no va a poder competir contra la publicidad a favor de la chatarra. No de manera significativa.
SEGUNDO: Porque inclusive cuando se le dice a la gente que la chatarra hace daño, la gente la sigue consumiendo. Los comentarios de respuesta cuando se le dice a alguien que la chatarra es dañina, causa diabetes, cáncer, etc, son por el estilo de "pues de algo nos tenemos que morir."
Tan es verdad que a raíz del coronavirus NO bajó el consumo de chatarra.
¿Por qué no hace caso la gente? Porque la chatarra está diseñada para ser ADICTIVA.
A la comida chatarra le ponen un montón de azúcar y sal. Ambos ingredientes son altamente adictivos. Una persona adicta al azúcar va a desarrollar diabetes. Y una persona adicta a la sal va a desarrollar hipertensión. Una campaña publicitaria NO va a cortar una adicción. Por mucha conciencia que tenga un adicto de lo dañina que es la sustancia a la que está adicto, no va a dejar de consumirla de manera voluntaria.
Siendo el caso, la ÚNICA manera en la que el gobierno de AMLO podrá disminuir el consumo de comida chatarra en México es haciendo más difícil obtenerla.
Y la única manera de hacer eso es subiendo los impuestos a la comida chatarra.
La única manera de que la gente consuma MENOS chatarra, es haciendo que cueste más.
Si AMLO de verdad quiere que la gente consuma menos chatarra, debe entonces enviar una iniciativa preferente al congreso para que se aumente el IEPS por lo menos a 50% del precio del producto a cualquier producto que tenga las siguientes características:
1. Bebida o comida con endulzante.
2. Bebida o comida con alto contenido añadido de sodio (excepto la sal en sí, obviamente).
3. Comida industrializada de cualquier tipo que use alta fructuosa de maíz. Porque, OJO; no sólo las sodas y los pastelitos tienen azúcar. Un montón de comida industrializada usa endulzantes de maíz, incluyendo catsup, barras de granola, galletas saladas, pan, etc. TODO producto que tenga endulzante debe pagar más impuestos.
No hay de otra. Las campañas contra las adicciones nunca han funcionado. A pesar de todas las campañas que se hicieron en los 80s y 90s, el consumo de drogas siguió creciendo. Y la comida chatarra es eso precisamente: productos que causan adicción.
Así que desde aquí le digo al Presidente: NO DESPILFARRE EL DINERO DEL PUEBLO EN UNA CAMPAÑA QUE NO VA A FUNCIONAR. Mejor suba los impuestos a la chatarra y verá cómo el consumo disminuye RÁPIDO.
Porque, OJO: En cuanto existe una vacuna contra el coronavirus, a la gente le va a valer gorro que la diabetes y la hipertensión sean factores de riesgo.
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