El presidente de Morena, Alfonso Ramírez Cuéllar, tuvo la ocurrencia de proponer que el INEGI mida la riqueza de las personas en México. Quesque para medir la desigualdad.
Acto seguido, la derecha hizo gran berrinche. Que porque entonces el gobierno se estaría metiendo en los asuntos privados de las personas.
La propuesta de Ramírez Cuéllar, desde luego, es pedorra. No sirve para nada, pero sí le da mucho atole con el dedo a la clientela de Morena. Pero la respuesta de la derecha a la propuesta pedorra de Ramírez Cuéllar fue una más de las hipocresías de los derechangos. Mire usted:
Para empezar, el INEGI ya mide la pobreza y la riqueza en el país. Lo único que no mide el INEGI es a los realmente ricos porque son muy pocos. Ninguno de ellos entra en la definición de los deciles de los niveles económicos que mide el INEGI, ya que deja de medir a partir de la clase media alta.
Si de lo que se trata es de incluir a los ricos en los deciles que ya existen, entonces que los incluyan y punto. El INEGI lo puede hacer con la mano en la cintura sin reformas constitucionales simplemente con los datos públicos del registro de la propiedad y del comercio. Si alguien es dueño de una casa en Las Lomas, obviamente va a ser rico.
Ahora bien, la reacción de la derecha asta masturbación mental de Ramírez Cuéllar es hipócrita por dos razones.
Primero: porque han estado jode y jode con que con AMLO aumentará la pobreza. ¿Qué les molesta entonces de que se mida con exactitud cuánta gente pobre y cuánta gente adinerada hay? Pues les molesta que se sepa que con AMLO habrá MENOS pobreza que con el PRIAN gracias a los programas sociales. Eso es lo que no quieren que se sepa.
Y segundo: le molesta a la derecha que se sepa que la mayoría de los derechangos son unos JODIDOS. Toooda su devoción al libre mercado no les ha generado suficiente riqueza para salir de pinches. Y si eso se sabe ¿quién chingados va a querer seguir apoyando al PRIAN? Eso es a lo que realmente le temen.
Si me preguntan, la iniciativa de Ramírez Cuéllar no es necesaria. Francamente en este momento es una reverenda PENDEJADA. En lo que debería enfocarse Ramírez Cuéllar es en proponer iniciativas para frenar el consumo de comida chatarra, que es lo que realmente amentó el porcentaje de mortalidad con el coronavirus en México.
Pero al mismo tiempo, me parece hipócrita por parte de la derecha que no queira que se sepa cuánta riqueza hay en México luego de 40 años de neoliberalismo y cuánta habrá luego de 6 años de lopezobradorismo. Esa debería ser su mejor carta para defender a su postura económica. Pero no quieren que se sepa precisamente porque saben que entonces a los derechangos se les verían los calzones y estarían faroleados.
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