Publicó lo siguiente El Universal el pasado miércoles 3 de julio:
En San Lázaro, nos comentan, hay una lista negra de al menos nueve secretarios (del gobierno de AMLO) con los que hay problemas de interlocución y a decir, incluso de varios de los legisladores de Morena, están afectando al gobierno lopezobradorista. Dicen que algunos por soberbia, y otros por el desconocimiento de los temas que atiende su dependencia, han evadido a toda costa acudir a San Lázaro, y en algunos casos han enviado a representantes. Aseguran los morenistas que estos secretarios le han regateado la interlocución a su bancada, y desde luego, a las de oposición. Ahora se pedirá comparezcan para informar sobre el Programa Especial Concurrente (PEC) para el desarrollo rural en el que hay preocupación por los recortes. Los secretarios convocados serán: de Agricultura, Víctor Manuel Villalobos; de Hacienda, Carlos Urzúa; de Salud, Jorge Alcocer; de Bienestar, María Luisa Albores; de Comunicaciones y Transportes, Javier Jiménez Espriú; de Educación, Esteban Moctezuma; de Desarrollo Urbano, Román Meyer; de Medio Ambiente, Víctor Manuel Toledo, y de Energía, Rocío Nahle. Algunos de ellos, nos dicen, son miembros “de honor” en la lista negra, por lo que si se dignan aparecer por la Cámara, no recibirán un trato cálido de la bancada de su partido y menos de la oposición.
Urzúa y Jiménez Espriú han metido la pata, sí. Pero el problema con ellos ha sido más bien las burradas que les ha ordenado hacer AMLO.
Pero donde no debería extrañarle a nadie que ni los diputados de Morena los estén tragando es con los casos de Esteban Moctezuma y de Rocío Nahle.
Mire usted:
Desde hace años hemos estado señalando que Nahle es una fichita. No tuvo empacho con negociar cochinadas con el PRI cuando era diputada federal. AMLO la puso en SENER porque según esto sabía de petroquímica. Pero saber de petroquímica no hace a NADIE un administrador comptente para el rubro a su cargo.
Esto quedó clarísimo recientemente con la renuncia del titular de Energías Renovables, Luis González, lo cual es gravísimo debido a que pone en entredicho que el gobierno de AMLO realmente etsé interesado en energías renovables.
AMLO no se quiere dar cuenta, pero es por causa del calentamiento global que el sargazo esté llegando no sólo a las costas de Quintana Roo, sino que ya le dio la vuelta a la península de Yucatán y está llegando a las costas de Veracruz. Esto causa afectaciones al turismo en México y, por ende, a la economía del país.
Pero ni AMLO ni Rocío Nahle están interesados en darle prioridad a las energías renovables. Si interés está en hacer una nueva refinería y quemar carbón, como pretende hacer CFE para producir electricidad. Sobra decir que las gasolinas y el carbón empeoran el calentamiento global.
Nahle debió haber sido removida del equipo de AMLO desde hace mucho tiempo, pero sigue ahí quién sabe por qué.
Con Esteban Moctezuma las cosas están igual o peor. La SEP ha tenido todo tipo de dislates con los libros de texto gratuito, con el IMER, con la corrupción de la CONADE, y en general para lo único que ha servido Esteban Moctezuma es para que TV Azteca tenga a uno de sus achichincles en el gabinete de AMLO.
Faltan, desde luego, otros imbéciles en el gabinete de AMLO que nunca debieron estar ahí, incluyendo a Manuel Bartlett, Olga Sánchez Cordero, Paco Ignacio Taibo, Alejandra Frausto, y varios más.
Lo que es realmente lamentable es que las cosas hayan tenido que llegar a este punto. Se les advirtió a tiempo que las fichitas a las que AMLO puso en su gabinete como pago político --o por ignorancia-- iban a ser un problema. A medio año del inicio del gobierno de AMLO esto es más que notorio. Y a años será no sólo notorio, sino de plano un riesgo para la viabilidad del proyecto lopezobradorista.
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