Hizo muy mal Andrés Manuel López Obrador al pedirle al diario Reforma que revele las fuentes de quien le filtró la carta que le envió al rey de España para que pidiera disculpas por la conquista.
Muy, pero muy mal.
Por esto:
Para empezar, porque la prensa tiene que proteger a sus fuentes. Eso es de rigor. ESPECIALMENTE cuando se trata de temas que involucran a los gobiernos.
Simple y sencillamente no puede un gobernante pedirle a la prensa que revele una fuente. No es ético y habla muy mal del gobernante, ya que lo muestra como alguien de piel delicada y poca tolerancia a la crítica (como ya hemos visto que ocurre en los gobiernos de la 4T en esta columna.)
En segundo lugar, el tema es auténticamente pedorro. No tenía España de 2019 por qué pedirle disculpas a México por algo que ocurrió hace 500 años, cuando México nisiquiera existía como país y cuando ya existía una relación de conquista entre el imperio Azteca y el resto de los pueblos de Mesoamérica. Simple y sencillamente fue un despropósito escribir esa carta y ponerse de pechito para los jitomatazos. ¿Para qué pide fuentes entonces? Mejor que admita AMLO que la regó y asunto arreglado.
Por último, pedir fuentes muestra un nivel de paranoia en el gobierno de AMLO que sólo se explicaría si se saben débiles. Un buen gobierno que sabe que sus políticas funcionan jamás estaría tratando de saber quién lo está balconeando. No sólo eso; un gobierno cuyas políticas funcionan no tendría nada que le pudieran balconear.
Pero lamentablemente en la 4T la gente cercana a AMLO ha cometido estupidez tras estupidez, lo cual le ha ido restando fuerza a su gobierno ante la opinión pública.
En vez de pedir fuentes a la prensa, AMLO debería considerar seriamente hacer cambios en su gabinete y en sus políticas. Porque así como va, cualquier jalada estilo la carta al rey de España va a hacerle muchas olas. Ese es el problema de fondo. Si se hubiera dado el escandalito por lo de la carta de AMLO al rey de España, pero su gobierno y sus políticas estuvieran funcionando bien, no hubiera pasado nada. Pero con todos los errores que AMLO ha estado cometiendo, la carta al rey de España se convirtió en una válvula de escape para las inconformidades y quejas que sí hay por las pifias de su gobierno.
Mientras AMLO no entienda esto, su gobierno simple y sencillamente va a seguir en problemas.
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