La semana pasada mi carnal Jonathan Reyes alias Masiosare (@econometal) comentó que las críticas que se han dado en los últimos días contra Andrés Manuel López Obrador y su gobierno ya no son cuestionamientos, sino "crucifixión."
A lo cual le respondí solicitándole encarecidamente y de la manera más atente que no mame.
Matemáticamente no hay tal crucifixión. Lo que sí hay son muchas ganas de la izquierda de hacerse güeyes con las cagadas del gabinete de AMLO, y usan a las críticas de la derecha para invalidar a todas las críticas aunque las críticas sean válidas.
"¿Cómo que matemáticamente, pinche Victor? ¡Tas orate!" dirán los lectores. A las pruebas me remito entonces:
Para empezar, 53% de los electores votaron por AMLO. Así que las críticas que recibe se dividen en dos grupos:
1. Criticas de derechangos que nomás atacan por joder.
2. Críticas de gente que votó por AMLO que critican porque de verdad quieren que se corrija un problema en su gobierno.
El primer grupo es minoritario por el simple hecho de que no representan a la mayoría de los electores. Se les puede tachar de hipócritas por no haber criticado antes al PRIAN, o de ardidos, o de lo que sea. Pero el hecho concreto es que so minoría. Son muy persistentes, pero son minoría.
El segundo grupo sí se debe tomar en serio, ya que no tienen una agenda política que dependa del fracaso de AMLO. Lo que buscan es corregir errores de verdad que sí hay en el gobierno de AMLO y que si no se corrigen sí puede causarle a AMLO una baja en la cantidad de gente dispuesta a votar por su partido. La cantidad de gente en ese grupo puede ser minoritaria o no dependiendo del tema, pero no buscan "crucificar" a AMLO, sino que corrija cuando se equivoca, cosa que es precisamente lo que esperábamos con un gobierno de izquierda.
Así que a nivel electorado, matemáticamente no hay crucifixión.
Segundo lugar: de acuerdo con encuestas recientes, la aprobación de AMLO tras dos meses en el cargo es de cerca de 80% de la población. Eso quiere decir que estadísticamente sólo 20% de los mexicanos critican a AMLO a manera de ataque, mientras que el resto o no lo critican o lo hacen sin intención chingativa, sino, de nuevo, para que corrija errores.
Y si sólo 2 de cada 10 mexicanos buscan joder a AMLO, entonces eso dista mucho de ser una cricifixión.
"¡Pero es que los medios se la pasan chingando a AMLO!" dirán los fans de Morena. Pues sí, pero eso no es nuevo. Y además, nadie los pela.
¿No les acabo de decir que casi 80% de los mexicanos apoyan a AMLO? ¿Cómo ocurrió eso a pesar de que los medios de derecha se la pasan jode y jode contra AMLO? Pues porque la gente no les hace caso. Y si no les hace caso la gente, no hay crucifixión. Hay cuestionamientos. Los de derecha si mérito muchas veces, los de izquierda con mérito siempre.
Si pese a las críticas de la derecha en los medios AMLO sigue siendo popular, entonces simple y sencillamente no hay "crucifixión." Hay muchas críticas al gobierno, lo cual debería ser lo normal en una democracia, y hay algunos izquierdistas que se espantan porque se siguen viendo a sí mismos como minoría cuando no lo son.
Son el 53% de los electores y el 80% de los que están a favor del gobierno de AMLO.
¿Por qué se espantan entonces?
Pues porque están acostumbrados a sentirse perseguidos por el poder. Pero ya no son la oposición perseguida: ya son el poder. Y como poder que son no pueden alegar que los están crucificando, ya que como poder lo que tienen ahora es una responsabilidad con el país para no cagarla.
Y mientras la sigan cagando, los seguirán criticando.
Pero como dije; las críticas que cuentan no son las de la derecha, ya que son minoría. Las críticas que de verdad cuentan son las de otros izquierdistas, ya que lo que buscamos los izquierdistas que criticamos los errores de AMLO no es darle un golpe de estado, como sí quisiera la derecha, sino forzarlo a corregir sus errores para que su gobierno sea exitoso y así la derecha jamás pueda regresar al poder.
¿Es tan difícil de entender?
No se le puede solapar ni defender todo a AMLO ni a su gobierno. Eso es más bien la receta más eficaz para que su gobierno fracase.
PD: Y miren lo que son las cosas. En algunas de las críticas que le han hecho al gobierno de AMLO sí han tenido que corregir. Chillando y pataleando, como en el caso de Álvarez Buylla, pero lo han hecho. ¿No es eso lo que debería ocurrir en cualquier gobierno? Que siga ocurriendo entonces. Malo que siguiéramos como con el PRI que por más que se les señalaban sus errores nunca corregían nada.
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