Fui anoche al Zócalo de la Ciudad de México a festejar el triunfo de Andrés Manuel López Obrador. Desde Varias cuadras antes los rios de gente llegaban uno tras otro coreando "¡Presidente!" y "¡Es un honor estar con Obrador!"
Esta vez no me interesó estar cerca del templete. Fui como un ciudadano más y vi a la gente festejar con un anonimato que, debo decir, disfruté muchísimo.
Pasó algo que me dio mucho gusto. Mi teléfono se descompuso desde el sábado, así que me fui sin internet al Zócalo. Como en los viejos tiempos del Sendero. Pero ya estando en el Zócalo, a mi alrededor había cientos de personas con sus celulares grabando y tuiteando el festejo en el Zócalo. Informando en tiempo real lo que ocurría.
Eso me dio gusto porque cuando hice el Sendero la idea era dejar de hacerlo pasadas las elecciones de 2006. Lo seguí haciendo por el fraude de Felipe Calderón y el cerco informativo que los medios de derecha seguían imponiendo, pero para mis adentros yo esperaba que algún dia hubiera muchos proyectos de información ciudadana que rompieran el cerco informativo y así no tuviera yo que seguir con esa responsabilidad.
Todos esos celulares en el Zócalo hicieron que me diera cuenta de que se logró el objetivo. Y sentí un alivio enorme. Lo que empecé en 2004 junto con mi carnal Masiosare (@Econometal) lo retomó la gente por su cuenta y derrotó a la guerra sucia, a los medios de derecha y a los mentirosos y chayoteros de siempre.
Esa misma gente organizada y harta de la pestilencia de la derecha es la que le dio a Andrés Manuel 53.8% del voto en todo el país. Inédito. Ningún Presidente en la historia de México ha tenido una votación tan alta. Inclusive Francisco I. Madero, con su 99% del voto en 1911, tuvo menos de 20 mil votos en total. AMLO se perfila para tener más de 40 millones de votos.
La derecha salinista insistió una y otra vez en que la mayoría de los mexicanos no quieren a AMLO; que debería haber una segunda vuelta para que quien llegara a la presidencia tuviera legitimidad. Pues bien, con casi 54% del voto, Andrés Manuel López Obrador llega al poder con una legitimidad inédita en la historia de México. Vaya, esa legitimidad no la tiene ni Obama.
No exagero. En 2008 Barack Obama tuvo el 52.9% de la votación. AMLO rebasa ese porcentaje por casi 2 puntos.
Esa legitimidad es la que hizo que, por ahora, el PRIAN y la mafia salinista del poder doblaran las manos, no sin antes hacer un berrinche entripado, como lo hizo Diego Fernández de Cevallos.
Y habrá mucho que criticarle al Peje y a Morena para que no terminen convirtiéndose en otro PRD. Haremos esa crítica, desde luego. Y la haremos pronto. Porque la legitimidad que ayer le concedimos a AMLO en las urnas NO es un cheque en blanco. Como bien dijo el clásico; "sólo el pueblo puede salvar al pueblo."
Pero por hoy lo que festejo es que haya ganado la gente. Que por primera vez en la historia de México la gente votara por quien de verdad quería votar, sin miedo, rechazando dádivas, rechazando guerra sucia, y simplemente ejerciendo su derecho al sufragio efectivo. Ayer los mexicanos por primera vez tuvimos democracia.
PD: Por supuesto que seguiré escribiendo blogdeizquierda.com. Blogdeizquierda.com es el verdadero Sendero del Peje. Y más adelante seguiré haciendo el TOLIRO NIUS. Así como AMLO nevesuta apoyo contra la guerra sucua, también necesita crítica y zapes para que no la cajetee. Así que aquí nos seguimos leyendo mañana.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario