Surgió un buen debate en los comentarios del episodio de esta semana del TOLIRO NIUS respecto al tema de los chapulines de derecha que se fueron a Morena y Andrés Manuel López Obrador aceptó darles candidatura. Mi postura sobre los chapulines es que en la izquierda se sebe anular la boleta en la que aparezca el nombre de algún chapulín de derecha, pero votar por quien quieran en la boleta de presidente y en el resto de las boletas (senador, diputado, gobernador, alcalde, diputado local) en las cuales NO aparezca el nombre de un chapulín de derecha.
Pero a algunos borregos de Morena no les gustó esa idea y salieron con que hay que votar por derechistas de todos modos simplemente porque están en Morena y porque se les tiene que obligar a que hagan lo que diga AMLO y que porque sólo así AMLO tendrá el control del congreso.
Ese es un error garrafal y los argumentos que usan los borregos de Morena no se sostienen. Por varias razones:
1. Es imposible obligar a un chapulín de derecha a que haga lo diga AMLO una vez que ganó la elección el chapulín. Hay varios casos de esto. El primero y más contundente es Graco Ramírez, por quien AMLO hizo campaña en 2012 para que fuera gobernador de Morelos y en cuanto lo declararon ganador de la elección se le volteó a AMLO y se alineó con el PRI. Y lo mismo pasó con diputados como Eva Cadena que en cuanto la cacharon en alguna marranada renunció a Morena y no vota con Morena en el congreso de Veracruz. Lo mismo va a pasar con TODOS los chapulines de derecha.
2. Simple y sencillamente no hay una sola ley que obligue a los chapulines a permanecer en Morena si son electos para cargos públicos. En el momento en el que tomen protesta se pueden declarar "independientes" o cambiarse de partido y votar con el PAN y con el PRI.
3. AMLO no tiene los votos para tener mayoría en el congreso ni con chapulines. En el más guajiro de los casos, AMLO tendría 36% del voto debido a que habrá voto diferenciado para el congreso, ya que muchos de los que voten por candidatos independientes a la presidencia (si es que logran el registro) votarán por el PAN para el congreso. Así pasó en Nuevo León, en donde ganó el Bronco la gubernatura pero el PAN tuvo más votos para el congreso. Negarle el voto a los chapulines no cambiaría esa realidad. Para que AMLO tuviera mayoría en el congreso, López Obrador tendría que dehacerse de la ultraizquierda que aleja a votantes moderados en vez de meter a la derecha a Morena.
4. Tenga AMLO o no mayoría en el congreso, los chapulines, como ya vimos, no tienen ninguna obligación legal de votar con él ni de obedecer lo que diga Morena. Eso quiere decir que, al final, AMLO le estaría regalando no sólo votos, sino diputaciones (en caso de las pluris) a la derecha ¡con los votos de izquierdistas! Por lo tanto, lo mejor es anular a los chapulines.
Al final, el tema de fondo con los chapulines es este: El que manda no es Andrés Manuel López Obrador. El que manda es el votante. Y AMLO no puede hacerse tarugo con los reclamos de los votantes que le están recriminando por cometer el error de aceptar chapulines de derecha en sus filas. AMLO no puede hacer lo que se le pegue su gana. Pero como el Peje no hace caso a las críticas de los electores a los que les está pidiendo el voto, entonces el votante tiene el derecho a protestar negándole el voto a los chupulines por medio de la anulación de boletas en donde aparezcan chapulines de derecha.
OJO: NO estoy diciendo que anulen la boleta de presidente. En esa boleta voten por quién quieran. Y en otras boletas donde no aparezcan chapulines voten también por quién quieran. Pero si una boleta de senador, diputado, gobernador, alcalde, etc, aparece un chapulín de derecha, entonces la única manera de hacerle entender a AMLO que no están de acuerdo con eso es anulando. De esa manera se tiene la manera de votar por un presidente honesto, pero no se premia a la derecha que tanto daño le ha hecho al país y ahora en vez de mandarlos al basurero de la historia, los pretenden premiar con un hueso.
Y como dije en el TOLIRO NIUS: Los chapulines de derecha que más se notan en este momento son:
1. Gabriela Cuevas (PAN)
2. Lilly Téllez (Televisa, TV Azteca, atacó a AMLO y lambiscona de EPN)
3. Sergio Mayer (Televisa, atacó a AMLO)
4. Cuauhtémoc Blanco (interesado en el dinero del PES, pésimo presidente municipal)
5. René Fijuwara (nieto de Elba Esther Gordillo)
6. Gerardo Fernández Noroña (interesado en el hueso, achichincle de un sitio priista que ahora es propiedad de Televisa, le hizo el caldo gordo a los que atacaron a AMLO)
Y probablemente habrá más. Pero hay un antídoto eficaz contra ese tipo de plagas políticas: voto nulo a los chapulines de derecha.
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