La guerra interna que hay en el PAN entre Felipe Calderón y Ricardo Anaya por la candidatura presidencial de ese partido cada vez se pone peor y tiene al salinismo encabronadísimo debido a que la candidata a quien respalda el salinismo es Margarita Zavala.
Zavala, que en realidad sería prestanombres de Felipe Calderón en la presidencia si llegara al cargo, le garantizaría al PRI impunidad, contrario a Anaya, quien forzosamente tendría que dar un quinazo para legitimarse ante la derecha de llegar al poder.
Esa es la razón por la cual en el salinismo están molestos con Anaya. Porque está impidiendo que Felipe Calderón regrese al poder por medio de su esposa.
Eso no quiere decir que Anaya sea un buen candidato. En el fondo Anaya es lo mismo que Zavala. Pero como Anaya no tiene el amasiato con el PRI que sí tiene Felipe Calderón, y al salinismo no le gustan las sorpresas, el PRI prefiere que su candidata panista sea Zavala.
Y es precisamente por eso que en lo más recalcitrante de la derecha salinista están lanzando dardos contra Anaya. El monero de la derecha, por ejemplo, hizo un berrinche en Twitter cuando senadores panistas que se oponen a Ernesto Cordero lo tildaron de traidor. Luego, en un cartón, el monero de la derecha pretendió comparar a Anaya con Stalin, ante el amago de la expulsión de los senadores calderonistas que se alinearon con el PRI para poner a Ernesto Cordero de presidente del Senado a cambio de apoyar al Fiscal Carnal Raúl Cervantes.
Lo increible del caso es que en Morena no se han dado cuenta que para fines electorales a quien más le conviene que Anaya le gane la guerrita interna a FeCal es a Andrés Manuel López Obrador. Por dos razones:
1. Porque todas las encuestas muestran que Anaya tiene menos intención de voto que Margarita Zavala. Por lo tanto, si Anaya fuera el candidato del PAN, se reduce el margen de error de las encuestas y AMLO sale del empate técnico, con lo cual se refuerzan las posibilidades del Peje de ganar la presidencia en 2018.
2. De lograr Anaya derrotar a Calderón, e impedir que Margarita Zavala sea la candidata del PAN, habría un rompimiento de Calderón con el PAN y eso significaría una de dos cosas:
A) O Calderón pone a su esposa de candidata independiente, con lo cual se divide el voto de derecha y por lo tanto gana AMLO en 2018.
B) O Calderón no se sale del PAN pero opera para sobotear a Anaya para ver si así crecen los votos del PRI. En ese caso, también aumenta el margen de ventaja de AMLO en las encuestas y por lo tanto aumenta su posibilidad de llegar a la presidencia.
Lamentablemente en Morena son tan brutos que no se han dado cuenta de esto. Como en Morena no piensan en términos de estrategia, sino en términas de consignas que les dan sus jilgueros y luego repiten a como pericos, en vez de ver la oportunidad para dividir más al PAN se pusieron a atacar a Anaya, favoreciendo con eso a Felipe Calderón, cuya esposa es quien más votos le puede quitar a AMLO en 2018.
Pero en Morena están tan cegados por el fanatismo y la fantasía masturbatoria de la dizque pureza política (que no es tal, ya que Morena negoció en lo oscurito con el PRI en San Lázaro) que no se dan cuenta de que les conviene más que Anaya gane el pleito con FeCal. Porque si con el PAN entero Anaya no se le acerca a AMLO, con el PAN hecho trizas mucho menos.
A eso precisamente es a lo que me refiero cuando digo que en Morena no tienen estrategia ni saben de estrategia, y que por eso la derecha siempre se las deja ir doblada y sin crema. Como en la derecha tienen perfectamente bien medidos a los de la ultraizquierda, que son los que están en Morena, saben perfectamente cómo manipularlos para que hagan lo que la derecha quiere y así la derecha les pueda ganar.
El día que en Morena actúen en base a estrategia de verdad, la derecha va a estar en serios problemas, ya que no podrán manipular más a Morena y no les podrán ganar.
A eso es a lo que de verdad le teme el Salinismo. Y por eso precisamente el salinismo le ha hecho creer a Morena que quienes les señalamos sus errores para que los corrijan somos los villanos. En el PRI, eso sí, están revolcándose de la risa por la manera en la que los borregos de Morena se la tragaron toda.
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