En comparecencia ante el comité de seguridad nacional del Senado de Estados Unidos, el Secretario de Seguridad Interior de Donald Trump dijo que a la administración de Trump no le convendría que un izquierdista fuera presidente de México, en obvia referencia a Andrés Manuel López Obrador.
Quien le hizo la pregunta fue el derechista John McCain, a quien Felipe Calderón pretendiera ayudar en las elecciones de 2008 para derrotar a Barack Obama.
Dijo Kelly:
"Tenemos un problema con México. Hay mucho sentimiento antiestadounidense en México. Si la elección en México fuera mañana, probablemente se obtendría a un antiestadounidense de ala izquierdista como Presidente de México. Eso no puede ser bueno para Estados Unidos."
Eso es falso. No hay un sentimiento anti-Estados Unidos en México, sino anti-Trump. Pero sólo porque Trump fue el primero en difamar y mostrar racismo hacia México.
Resulta curioso que esto es justo lo que Felipe Calderón estuvo tratando de impulsar en Estados Unidos por medio de su títere Margarita Zavala: que A Trump le convenía el PAN, no Andrés Manuel.
Con lo cual tenemos que el PAN ya se quitó la careta; abiertamente pretenden ser aliados de Donald Trump.
Sobra decir que con AMLO en la presidencia el gobierno mexicano no le aguantaría ninguna de sus jaladas a Trump. No habría un Luis Videgaray poniéndose de tapete con Trump ni le aguantaría a Trump chingaderas como eso de sugerir que invadiría a México.
Pero el PAN sí.
Razón por la cual a los mexicanos que no quieren que Trump sea el que mande en México deben votar por Andrés Manuel López Obrador, no por el PAN ni por el PRI.
Eso sí; es interesante que hasta en Estados Unidos ya saben que el que va a ganar será López Obrador.
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