El martes 14 de febrero Grupo Alfa anunció que venderá sus negocios en el sector energético en Estados Unidos y en Méxicom incluyendo los contratos incentivados que tiene con Pemex.
¿La razón? Porque debido a los bajos precios del petróleo el negocio ya no es rentable.
Lo único con lo que se quedaría Alfa, y eso en calidad de "veremos", es algunos pozos en Estados Unidos. Pero en México venderán las plantas de cogeneración de Altamira y Cosoleacaque, Veracruz.
Eso quiere decir que la reforma energética de Enrique Peña Nieto fracasó. Los privados no le quieren seguir entrando al sector energético porque no es rentable.
Eso queire decir que Pemex JAMÁS se debió haber privatizado, como lo hicieron el PRI y el PAN, sino que debió aumentar su capacidad de refinación por parte del Estado para producir más gasolinas y así asegurar precios bajos de los combustibles sin tener que depender de los precios internacionales.
Pero el PRIAN, que no es otra cosa más que la encarnación partidista del salinismo, a huevo quería privatizar Pemex.
Pues ahí tienen el resultado: un fiasco que ahora ni los privados quieren.
Y mientras tanto, usted paga más cara la gasolina, el gas y la electricidad.
¿Quiere que eso cambie? Vote por la izquierda en 2018. Porque con el PAN y el PRI habrá más de lo mismo.
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