El pasado martes 6 de octubre aparecieron no una, ni dos, sino TRES notas al hilo que muestran la manera en la que la economía se le sigue desplomando a Enrique Peña Nieto por sus pésimas políticas económicas priistas.
La primera y la más obvia: el Fondo Monetario Internacional redujo la proyección del PIB para México a 2.3%, coincidiendo con los expertos del Banco de México y con la CEPAL, que también lo redujo.
El problema que ve el FMI es la debilidad de Estados Unidos y poca demanda doméstica.
Eso quiere decir que el gobierno federal priista no ha hecho nada para mejorar el ingreso de los consumidores mexicanos y, en vez de eso, le apuesta a seguir dependiendo de Estados Unidos.
El detalle es que esto no es nuevo. Se lo están advirtiendo a Peña Nieto desde hace meses pero se niega a cambiar las cosas de como han estado desde el sexenio de Salinas. ¿No que mucho cambio y mucho "mover a México"? ¡Pero hacia el despeñadero!
¿Cómo se podrían cambiar las cosas? Sencillo: aumentando el salario mínimo; eliminando la consolidación fiscal (que ahora tiene otro nombre) para que el Estado tenga más ingreso para más obras públicas y por ende más empleos; y sacando a todos los privados del sector energético para no perder ingreso petrolero, además de construir más refinerías para que baje el precio de la gasolina (se puede hacer con el dinero que se obtenga de eliminar la consolidación fiscal).
Pero Peña no hace nada de eso para beneficiar a los grandes empresarios que le dan moches.
Pero hay más. El mismo día Reforma publicó que en septiembre la exportación de autos mexicanos cayó 1.7% respecto al mismo mes de 2014.
Supuestamente el acumulado de exportaciones de enero a septiembre es 6.7% mayor al mismo periodo del año anterior, pero sólo porque en 2014 hubo 0% de crecimiento en exportaciones, por lo cual el supuesto crecimiento de 6.7% en realidad no es tal.
Ah, pero el gobierno priista le sigue apostando a que otros compren lo que los mexicanos no pueden comprar porque el gobierno priista tiene al país en la pobreza.
Por último, la confianza del consumidor tuvo una tercera baja mensual consecutiva al ubicarse en 89.74 puntos en septiembre de acuerdo con datos del INEGI.
A nivel anual, la confianza del consumidor ha caído 1.41%. Esto es, cada vez menos mexicanos creen que no podrán hacer compras debido a la situación económica por la que atraviezan.
Particularmente, cada vez menos mexicanos consideran que podrán comprar muebles, televisores, lavadoras y otros electrodomésticos. Es decir, cada vez hay menos clase media.
¿Ven por qué el PRI no debe seguir en el poder? Lo mejor es votar por la izquierda.
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