Esta semana el líder del PRI en la Cámara de Diputados, César Camacho, ha estado haciendo anuncios rimbombantes de supuestos recortes al gasto en la cámara de diputados, pero que en realidad son un engaño para hacerle creer a la gente que el PRI está siendo austero, cuando en realidad el PRI se ha negado a recortar los gastos de verdad onerosos en San Lázaro.
Mire usted por qué lo que están haciendo el PRI y Camacho es un engaño:
Primero, el martes 8 de septiembre, Camacho dijo que la Cámara de Diputados recortaría al 50% los gastos directivos y administrativos de la Junta de Coordinación Política.
Se quiso colgar la medallita por ese recorte. Dijo: "y lo digo sabiendo que cuento con los votos suficientes para resolverlo."
Luego, al día siguiente, Camacho anunció que los diputados de la bancada del PRI renunciarán a hacer uso de vehpiculos y teléfonos celulares pagados con el erario. Que lo van a hacer como "muestra de voluntad" de los diputados priistas de ajustarse a los tiempos de austeridad promovidos por Enrique Peña Nieto en el presupuesto de egresos de 2016.
Que sumando el recorte al gasto de la Junta de Coordinación Política y a otros órganos de la Cámara de Diputados se pueden ahorrar 500 millones de pesos en tres años, mientras que la renuncia de los priistas a los celulares y autos pagados por la Cámara ahorrarían 30 millones de pesos en 3 años. Es decir, un ahorro de 530 millones de pesos en 3 años.
Lo cual podrá sonar muy impactante, pero en realidad no lo es si lo comparamos con el dinero al cual el PRI se negó a renunciar: el de las subvenciones.
Las subvenciones son dinero que le dan a los diputados supuestamente para que hagan estudos y paguen asesorías. Ese dinero suma en total 3 MIL 400 MILLONES DE PESOS. Más de 6 veces lo que supuestamente quiere el PRI que ahorre la Cámara de Diputados.
Pero César Camacho se negó a renunciar a esas subvenciones. Lo diho él mismo el pasado 31 de agosto, tachando además a la idea de renunciar a las subvenciones, de acuerdo con Reforma, como "tufillo demagógico."
"Veámoslo más como un área de oportunidad, más que como oportunidad para el medro político partidario", dijo Camacho.
¿Entonces renunciar a los celulares y autos no es demagogia? ¿Lo de decir que cree tener los votos para recortar a la mitad el gasto de la Junta de Coordinación Política no es medro político partidario?
Que se vaya Camcho a la chingada. Anunciar como un gran logro de austeridad el recortar 530 millones de pesos cuando unos días antes se negó a que se ahorraran 3 mil 400 millones es un engaño y un insulto a la inteligencia de los mexicanos.
Ah, y la cereza del pastel: Ninguno de los diputados priistas ha pedido que les reduzcan el sueldo ni que les quiten las prestaciones onerosas como el seguro médico privado, la caja de ahorro, los vuelos pagados por el erario (que es un gasto mucho mayor que los autos), o los viajes de lujo.
En otras palabras, los priistas nadamás han estado proponiendo medidas para la foto, pero a sus privilegios de verdad no van a renunciar.
Así que mejor que Camacho y los priistas no se quieran hacer los héroes austeros porque no lo son. Son unos cínicos que pretenden, una vez más, engañar a los mexicanos.
PD: Por cierto; ¿cuál austeridad de Peña Nieto? El paquete económico que envió al congreso sólo contempla una reducción del 18% del gasto del gobierno, cuando podría reducirlo mucho más si se redujeran a la mitad los sueldos de la alta burocracia y sus prestaciones onerosas. Que no mamen los priistas. A ese tipo de austeridad siempre se han opuesto porque quieren mamar del presupuesto.
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