Durante y después de las campañas electorales de 2015, la gente del ahora gobernador electo de Nuevo León, Jaime Rodríguez "El Bronco", juró y perjuró que no sería candidato a la presidencia en 2018.
Nadie les creyó. Y ahora la mentira del Bronco quedó totalmente al descubierto, ya que ayer mismo dijo que no se descartaba para competir por la presidencia.
No solo eso. Dijo además, en una comida con estudiantes de la Universidad Autónoma de Nuevo León, que ya prepara giras a Oaxaca, Puebla, Veracruz y Tamaulipas. Que dizque porque hay gente que quiere abandonar sus partidos y hacerse independientes.
Lo cual sería una patraña, ya que un grupo de políticos aglutinados ante una sólo figura política no es otra cosa más que un partido sin registro.
La verdad, me parece bien que el Bronco se quite la careta y se muestre tal cual es; mentiroso como buen priista.
Me parece bien porque si el Bronco lanza una candidatura presidencial independiente en 2018, como ya mostramos en esta columna, la presencia de un candidato independiente le quita al PAN 67% de su voto y 35% al PRI.
Si el PRI pierde un tercio de su voto en una elección presidencial, tendría en el caso más optimista 24.83% del voto, cantidad con la cual no podría rebasar al 29% de la izquierda en alianza.
¿Y el Bronco? Tendría entre 20% y 25% en el más optimista de los casos. No le alcanzaría para ganar, pero sí para dividir el voto del PRIAN y garantizar así el triunfo de la izquierda.
Así que, por favor: que sí se lance el Bronco en 2018. Ya va siendo hora de que a los que les toque que les dividan el voto en una elección presidencial para que pierdan y gane la izquierda sea a los PRIANistas.
PD: En 2006 Patricia Mercado dividió el voto de la izquierda y le costó a AMLO suficientes votos para que Felipe Calderón pudiera hacer su fraude. Y en 2012 el PRI intentó usar a Gabriel Quadri para dividir de nuevo el voto de izquierda. Así que ojalá que en 2018 sí se lance el Bronco para que divida al PRIAN pero no gane.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario