Fue Joel Ortega quien dio a conocer el resultado de la investigación sobre el choque de trenes del Metro en la estación Oceanía de la Línea 5 del Metro, según la cual el choque fue por un supuesto error de los conductores.
Pero ayer Reforma dio a conocer que las bitácoras donde se registraron los pormenores de los hechos fueron alteradas el mismo día en el que ocurrió el choque.
¿Cómo es que Joel Ortega omitió dar a conocer ese dato cuando dio a conocer los resultados de la investigación?
Y no es una omisión menor. Con copias de las bitácoras en mano, Reforma señala que desaparecieron folios de páginas que deberían ser consecutivas, y que es justo donde se describen los hechos antes del accidente.
Hay además campos en la bitácora que no están debidamente llenados por los monitoristas y apareen con diferentes tipos de letra.
Lo más grave es esto: si las bitácoras hubieran sido alteradas por el personal del Metro, a quien Ortega pretendió culpar por el choque, Ortega hubiera sido el primero en señalarlo. Pero no dijo absolutamente nada al respecto cuando presentó las conclusiones de la investigación.
¿Entonces quién hizo las alteraciones?
OJO: Es precisamente con las bitácoras como se puede saber las causas del choque, ya que es ahí donde se anota lo que ocurre en el Metro conforme va ocurriendo.
Y no; La caja negra no es el único elemento que permite saber lo que ocurrió.
De hecho, forzosamente nos tenemos que preguntar si la bitácora es el único documento o elemento de prueba que está alterado.
Esto que publica Reforma debería ser suficiente para que el Jefe de Gobierno del DF, Miguel Ángel Mancera, le pida la renuncia a Joel Ortega. No es posible que algo tan grave como la alteración de una bitácora haya ocurrido sin que Ortega lo haya notado.
Porque una de dos: o Joel Ortega es tan incompetente que no se pudo dar cuenta de algo tan grave como la alteración de bitácoras, o sí lo sabía pero lo ocultó.
Francamente no me interesa cual de las dos opciones es el caso. Se trata del transporte público del DF y mientras Ortega sea el director del Metro, y el Metro no puede ser manejado con incompetencia, sea por omisión o por dolo.
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