Una vez más el PRI hizo berrinche por la candidatura de Marcelo Ebrard como diputado federal suplente y mandó a la sucursal del PRI, el PVEM, a poner una queja contra Ebrard ante el Tribunal Electoral.
Que porque, dice el PVEM, la candidatura de Ebrard como suplente contraviene la sentencia del TEPJF con la cual revocan la candidatura de Ebrard como plurinominal.
Lo cual es falso.
Para empezar, la sentencia del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación contra la candidatura de Ebrard es ilegal, ya que alega que Ebrard participó en dos procesos electorales de dos partidos de candidatura a diputado al mismo tiempo, pero eso nunca ocurrió. No participó en dos al mismo tiempo, sino que al terminar un proceso participó en otro.
Y eso lo admitió uno de los magistrados del TEPJF.
En segundo lugar, la sentencia del Tribunal Electoral se refiere a una candidatura para titular de una plurinominal.
Por lo tanto, la candidatura de Ebrard como suplente no puede contravenir a la sentencia del TEPJF puesto que la sentencia se refiere a una candidatura titular como pluri, no como suplente.
¿Por qué? Pues porque los candidatos suplentes no tienen las mismas atribuciones que los titulares.
Punto.
No se contraviene la sentencia del TEPJF -sentencia que es ilegal en sí- ni hay ilegalidad alguna en la candidatura de Ebrard como suplente.
Lo que llama la atención es que el PRI esté tan obsesionado con impedir que Ebrard sea diputado. A MORENA los priistas nunca le han hecho las cochinadas que le han hecho a Ebrard.
Lo cual indica que quien le puede ganar al PRI en 2018 no es AMLO, sino Ebrard.
PD: También llama la atención que esta vez los chuchos -que no el PRD, no es lo mismo- le hayan entrado a los recursos legales contra Ebrard para impugnar su candidatura. Lo único que está logrando Carlos Navarrete al meter su cuchara es afectar a la imagen del PRD. #FAIL.
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