Como ya se desplomó en las preferencias electorales y se cayó al segundo lugar en Sonora y Nuevo León, el PRI cayó en la desesperación y ayer pretendió engañar a la opinión pública inflando con bots el hashtag "PRImerosEnLasEncuestas.
El hashtag pretendía que la gente creyera que el PRI era el partido con mayor preferencia electoral en México en base a una encuesta de Mitofsky de abril para preferencia electoral para diputados federales.
Pero hubo un detalle de la encuesta que le echó abajo su teatrito al PRI. Mire usted:
En la izquierda sólo hay alianza entr el PRD y el PT. Pero si hubiera alianza entre todos los partidos de izquierda (PRD, PT, MC, MORENA) la izquierda rebasaría al PRI:
Tanto en la preferencia bruta como en la preferencia "efectiva" la izquierda rebasa al PRI de manera contundente.
"Ah, pero si le sumas al PRI los votos del PVEM ganan los priistas", dirán algunos.
Lo cual es cierto. Pero hay dos detalles:
1. La ventaja del PRI con el PVEM caería dentro del margen de error de la encuesta, por lo cual la izquierda les podría ganar.
2. Hay que recordar que en 2018 existe una probabilidad muy alta de que los cuatro partidos de izquierda vayan en alianza para la elección presidencial, por lo cual los números de 2015 empiezan a mostrar quién ganará esa elección.
Porque en 2018, dependiendo de quién sea el candidato, la izquierda sólo necesitaría entre 3.1 y 4.2 puntos de voto útil del PAN para poder derrotar al PRI.
O tal vez menos porque para 2018 el desgaste del PRI por el desastre económico causado por Enrique Peña Nieto, la impunidad por su corrupción, y la inseguridad, van a echar abajo aún más la preferencia electoral del PRI.
Sobra decir que si Andrés Manuel López Obrador y loc chuchos no hubieran causado la división de la izquierda que hay hoy en día, la izquierda estaría en condiciones para derrotar al PRI, mandar al PAN nuevamente al tercer lugar, y reforzar su presencia en la Cámara de Diputados.
La buena noticia es que el PRI no tendrá la mayoría absoluta en el congreso una vez que se repartan la plurinominales, lo cual le va a complicar las cosas a Peña Nieto, ya que tendrá que lidiar con los partidos de izquierda, que probablemente tendrán más diputados en conjunto que el PRI.
El PAN, por lo tanto, regresaría a su ya conocido papel de achichincle del PRI a la hora de aprobar leyes que perjudiquen a México.
A menos, claro, que los electores panistas se den cuenta de que es mejor votar por la izquierda para evitar que el PAN y el PRI sigan perjudicando a México.
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