Lo que faltaba. El gobierno federal priista de Enrique Peña Nieto le inyectó más de 600 millones de pesos del erario para pagar el seguro de depósito que debió haber pagado Ficrea pero que no pagó.
De acuerdo con Reforma, sin los 600 millones no se hubiera podido cubrir el depósito que por ley le corresponde a los afectados.
En otras palabras, el gobierno de Peña Nieto está usando dinero público para pagar las deudas de defraudadores, tal y como pasó con el FOBAPROA.
En cambio, quienes cometieron los fraudes no pagan nada.
Cabe recordar quel el gobierno federal priista de Enrique Peña Nieto no detuvo los fraudes de Ficrea a pesar de que supuestamente los estaba vigilando.
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