El gobierno federal priista de Enrique Peña Nieto admitió que la crisis económica actual, que incluye devaluación histórica, así como disparos inflacionales, continuará lo que resta del sexenio debido a la caída de los precios del petróleo.
De acuerdo con Reforma, el titular de Pemex, Emilio Lozoya, admitió que los precios bajos del petróleo podrían continuar durante los siguientes 3 años. Es decir, el resto del sexenio. Además, el titular de Hacienda, Luis Videgaray, admitió también que el precio del petróleo no se recuperará en el corto plazo.
Lozoya pretendió hacerle creer a la opinión pública que no importa el desplome del petróleo porque como cuesta 23 dólares extraer un barril de petróleo en México, aún es rentable para empresas privadas venir a invertir en el sector petrolero en México.
Sin embargo, Lozoya omitió mencionar que esos precios sólo aplican para extracción en agas someras o en tierra firme, y que al precio actual del petróleo de menos de alrededor de 42 dólares dólares por barril, eso apenas le dejaría a la empresa inversionista una ganancia de menos 15.25 dólares por barril con un contrato de renta o producción compartida de 50%.
La cantidad sería menor si el contrato es por un porcentaje menor, lo cual ya no resulta atractivo para ningún inversionista.
Al margen, el hecho de que Pemex esté admitiendo que el precio del petróleo seguiría desplomado durante 3 años implica una crisis que difícilmente podrá soportar el país debido a que la baja en el petróleo es causa de devaluación.
A su vez, la devaluación es causa de incrementos en diversos artículos debido a la dependencia de México en la economía de Estados Unidos.
Ejemplo de esto es el precio del huevo, el cual se disparó más de 26% desde hace un año y 6% en lo que va de 2015 a causa del alaza en el dólar de acuerdo con los productores de huevo.
La única manera de impedir que continúe la crisis es sacando del poder al PRI. Recuérdelo cuando vaya a las urnas en junio próximo.
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