Va PRI por votos de panistas para las elecciones intermedias

Por Victor Hernández

Ante la debacle que le espera al PRI en las elecciones intermedias de junio próximo, el partido de Carlos Salinas de Gortari y Enrique Peña Nieto tiene ahora la estrategia de ir por los votos de los panistas.

Ayer, por ejemplo, de acuerdo con Reforma, el dirigente nacional del PRI, César Camacho, se lanzó contra el PAN, alegando que será derrotado en las elecciones de junio por oponerse a los proyectos sociales del gobierno priista.

"Los electores van a frenar a quienes crearon un partido para proteger intereses y nunca entendieron el progreso con igualdad, que es la justicia social. Ingénuamente le apuestan a la desmemoria", dijo Camacho.

"Pero la ciudadanía sabe quiénes son, lo que han hecho y lo que ahora mismo traman. No tienen cómo ni con qué ganar; por el contrario, un sinnúmero de factores, todos atribuibles a ellos, frustrarán sus ilusiones y los harán perder", agregó.

No paró ahí. Dijo que el PAN perdió la oportunidad de conducir la transición democrática, tiene deslealtad a sus principios y padece luchas intestinas; que sus militantes se conducen con mezquinidad y que sus hechos aplastan a sus dichos.

Además sacó a relucir los "moches de los mochos", en obvia referencia al conservadurismo panista.

Con el PRD no se metió, lo cual indica que el verdadero target político del PRI es el PAN.

Y es una jugada lamentablemente astuta. El PRI sabe que los panistas podrían votar por el PRI porque representan lo mismo.

Eso quiere decir que la izquierda debe empezar a hacer campaña no sólo para la izquierda, sino también para los electores panistas si es que quieren evitar que los porcentajes electorales del PRI crezcan.

Veo difícil que en MORENA vayan a tener el tino político y la estrategia para hacer una campaña que atraiga voto útil del PAN. Pero en el PRD podrían hacerlo. Quien lo haga, será quien gane en las elecciones de junio próximo.

PD: Desde luego es una completa hipocresía del PRI llamar corruptos a los panistas. En el PRI son igual de corruptos. El caso Casa Blanca y el caso Malinalco son pruebas recientes de que es el caso. Pero los priistas sí le apuestan a la desmemoria.