El gobierno federal priista de Enrique Peña Nieto dio a conocer que cinco expertos internacionales nombrados por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos investigarán el caso Iguala.
De acuerdo con Reforma, los cinco investigadores harán una verificación técnica de las acciones de búsqueda, atención a víctimas, e investigación criminal hechas or el Estado mexicano respecto a la desaparición forzada de los 43 normalistas en Iguala, Guerrero.
Los expertos tendrán por lo menos 6 meses para hacer la verificación.
Lo cual quiere decir que durante esos 6 meses el gobierno de Enrique Peña Nieto, que es el principal responsable de la masacre de Iguala al haberse negado a consignar a José Luis Abarca meses antes de la masacre, tendrá excusa para batear los cuestionamientos en su contra y le podrá echar la bolita a la CIDH.
Lo cual le viene de perlas al PRI porque en menos de 6 meses son las elecciones intermedias y durante todo ese tiempo el PRI podrá, de nuevo, echarle la bronca a la CIDH a pesar de que el verdadero responsable es el gobierno priista de Enrique Peña Nieto.
Por cierto que el grupo de investigadores lo único que podrá hacer en realidad es recomendaciones técnicas sobre las acciones de búsqueda. Es decir, no podrá señalar responsables, lo cual también beneficia al PRI.
Ah, y por cierto: A los 5 investigadores se les dará un millón de dólares para la investigación, viáticos, traslados y demás actividades. ¿Pagados por quién? No se dijo.
O sea que el tener 6 meses de excusa para batear los señalamientos sobre la responsabilidad que tiene el PRI por el caso Iguala en año electoral, costará un millón de dólares.
Pero no; los cuestionamientos no pueden parar simplemente porque se involucre la CIDH. El PRI es responsable -y sigue impune- por el caso Iguala y deberá ser castigado por eso en las urnas.
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