Hoy por la mañana, en Televisa, desde luego, el titular de la PGR, Jesús Murillo Karam, dijo que no se arrepiente por haber dicho "ya me cansé" al término de la conferencia de prensa sobre Ayotzinapa el viernes pasado. Que porque, dijo, "cuando dije estoy cansado, es que estoy cansado de esto, estoy cansado de esa violencia brutal, lo he vivido, lo tengo todos los días, sí me cimbra, sí me cimbra, además de que llevaba 40 horas sin dormir." Que porque lleva 30 días durmiendo 4 horas.
Lo cual es cinismo y desde luego que no es creible.
Tan no está cansado de la violencia que por eso no quiso investigar a José Luis Abarca cuando le presentó René Bejarano las acusaciones en su contra por asesinato. Y si sólo lleva 30 días durmiendo 4 horas, para eso se le pagan 200 mil pesos al mes.
Vamos, muchos mexicanos no duermen y hasta se enferman por el estress que les provoca no tener empleo o porque no les alcanza para mantener a sus familias y no dicen la misma barbaridad que dijo Murillo. Que renuncie.
Pero no fue la única barbaridad que dijo. Según Murillo Karam, los normalistas sí iban a tratar de reventar el destape de la esposa de José Luis Abarca, lo cual resulta inverosímil si consideramos que un destape municipal nada resuelve para el conflicto de los normalistas, el cual es con el gobierno estatal y con el gobierno federal. Dijo Murillo:
"No sabían a qué iban, ellos sabían que iban a no permitir un evento de destape de la esposa del Presidente Municipal, ellos en realidad no sabían, por eso dije que puedo asegurar con contundencia que esos jóvenes, esos chamacos tenían seis meses en la escuela estaban recién empezando a iniciar una vida".
Pues esa es la versión de los narcos, no la de los normalistas. De hecho, reportes de prensa revelaron desde hace semanas que los normalistas no iban a Iguala a detener ningún destape, sino a la marcha en la Ciudad de México por el 2 de Octubre, pero se detuvieron en Iguala a recaudar fondos.
Dice, por ejemplo, el reportaje de Proyecto 10 sobre el normalista Julio César Mondragón, quien fuera desollado el día de la masacre de Iguala:
Luego entonces todo marchaba en orden, hasta que un día sus compañeros le informaron a todos que tenían que ir a la marcha histórica del 2 de Octubre en el DF, una marcha en donde se recuerda la matanza de estudiantes que se manifestaban en ese entonces, claro que para ir tenían que buscar las condiciones para ello, por eso optaron por salir a todo el estado a botear (pedir cooperación), al grupo del “Chilango”, que era como le decían sus compañeros por ser originario del D. F.
Decidió ir a Iguala a recabar recursos. Su mala suerte fue que ese día daba su informe la esposa del Presidente Municipal y Presidenta del DIF , y ese evento los resguardaban, policías federales, estatales y municipales, ademas eran apoyados por la delincuencia organizada.
¿De dónde saca entonces Murillo Karam que los normalistas iban directo a impedir el destape de la esposa de Abarca? Lo que Murillo hizo de manera irresponsable al decir eso fue sugerir que si a los normalistas los mataron fue por culpa de los normalistas.
Ese tipo de bajeza es la que genera el enorme descontento en México y el mundo contra Enrique Peña Nieto y sus secuaces. Peña Nieto debe renunciar y con él deben renunciar Murillo Karam, Osorio Chong y Salvador Cienfuegos. Sólo así podrá empezar México a tener paz de verdad.
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