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miércoles, 12 de noviembre de 2014

Casa de Televisa no estaba a nombre de Angélica Rivera en 2012, sugere reporte #yamecanse

Por Victor Hernández

El sitio Aristegui Noticias publicó el lunes pasado que la otra casa de Angélica Rivera en Las Lomas, en el domicilio Las Palmas 1325, le fue transferido a la esposa de Peña Nieto por Televisa Talento SA de CV el 14 de diciembre de 2010, 17 días después de que se casaron. El inmueble tenía un valor de 27 millones 651 mil 744 pesos.

La nota de Aristegui Noticias indica que el mismo día, el 14 de diciembre de 2010, Grupo Higa compró la casa de Sierra Gorda 160, atrás de la casa transferida por Televisa.

Sierra Gorda 160 fue el segundo predio comprado por Grupo Higa supuestamente para ampliar la casa de Angélica Rivera.

Esto pone en entredicho las declaraciones de la presidencia respecto a la propiedad de la mansión de Las Lomas y de la propia casa de Angélica Rivera.

Primero porque en 2010 Rivera no tenía un trabajo fijo. Ella dejó de trabajar en diciembre de 2008. Su última telenovela con Televisa fue en 2007. ¿Entonces a cambio de qué le dio Televisa esa casa a Rivera?

OJO: Televisa recibió cientos de millones de pesos del erario del Estado de México para promocionar a Peña Nieto. Al darle la casa a Rivera, estaría en la misma sospecha que Grupo Higa de pago por favores recibidos.

Segundo: Según la presidencia, Rivera es "solvente" por su carrera artística y por eso pudo comprar la mansión de Las Lomas. Pero no compró la otra casa. Se la "transfirió" Televisa. ¿Entonces de dónde sacó la "solvencia"?

Tercero: De acuerdo con una nota de sinembargo.mx publicada en 2013, hasta marzo de 2012 no apareció ninguna propiedad registrada a nombre de Angélica Rivera en el Resgistro Público de la Propiedad. ¿Cómo es que casi dos años después de que Televisa le transfirió la casa a Rivera la propiedad no estaba a su nombre?

Cuarto: Según el vocero de la presidencia, Eduardo Sánchez, Angélica Rivera compró la mansión de Grupo Higa porque buscaba ampliar su casa de Las Palmas. Pero los terrenos para la mansión se empezaron a comprar un año antes de que Televisa le transfiriera la casa de Las Palmas, lo cual indica que la presidencia miente respecto a las propiedades supuestamente de Rivera, puesto que al momento de comprar los terrenos de la mansión, no existía aún -se supone- la propiedad de la casa de La Palma.

Pero lo que más indigna de todo esto, además de la tufarada a corrupción, moches, lavado y tráfico de influencias, es el hecho de que muy pocos medios le han dado seguimiento a este asunto.

Aparte de Aristegui, prácticamente sólo Reforma, Proceso, La Jornada, y los medios independientes en internet han publicado la noticia de la mansión desde un punto de vista crítico.

Los medios plegados al PRI o se han callado por completo o, en el mejor de los casos, han hablado sobre el tema de la mansión para tratar de justificar a Peña Nieto y a Rivera.

Lo cual da fe de lo verdaderamente turbio de este asunto.

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