Carlos Navarrete, dirigente del PRD, se negó de nuevo a renunciar a su cargo, como lo propone Cuauhtémoc Cárdenas.
De acuerdo con Reforma, Navarrete declaró que "pedir la renuncia de la dirigencia es un sinsentido, a menos que se esté proponiendo que el PRD no participe en las elecciones del 2015."
No lo es, desde luego. Su renuncia limpiaría la podredumbre que muchos están denunciando en el PRD y le regresaría al PRD muchos de los votos que se fueron a MORENA por el hartazgo con los chuchos.
Además, la declaración de Navarrete confirma que su contrapropuesta de que sea el Consejo Nacional del PRD el que decida su salida de la dirigencia nacional es una farsa, ya que claramente Navarrete no tiene ninguna intención de irse a pesar del daño que le está causando al PRD que Nueva Izquierda siga en la dirigencia.
"Er... Ok... ¿y eso qué tiene que ver con el coyote del correcaminos?", se estarán preguntando a estas alturas los lectores.
Pues que Navarrete también dijo lo siguiente:
"Cuando asumimos la dirigencia no nos entregaron un nombramiento, nos entregaron un cartucho de dinamita".
Lo cual me recuerda a esto:
La pregunta obvia es: ¿y si a Navarrete le entregaron un cartucho de dinamita, por qué sigue en el cargo?
Como el coyote del correcaminos, pues. Le truenan y le truenan sus bombas ACME y de todos modos sigue de necio.
De lo que Navarrete Coyote no parece darse cuenta, es que el coyote del correcaminos siempre pierde.
El problema es que al que Navarrete Coyote se está llevando entre las patas es al PRD.
PD: Si Navarrete sabía que le iban a entregar un cartucho de dinamita, y claramente le tronó en las manos ¿para qué sigue entonces en el cargo?
No hay comentarios.:
Publicar un comentario