El conflicto que se está gestando en el Instituto Politécnico Nacional a causa de un cambio en su reglamento interno apunta a un plan privatizador del PRI que además desestabilice y haga golpeteo al DF, a los estudiantes y a Miguel Ángel Mancera.
Las protestas estudiantiles en el IPN se produjeron debido a que la directiva del centro de estudios cambiaron su reglamento interno con un albazo, sin consultar a los estudiantes, ya que se consultó una semana antes vía correo electrónico institucional, el cual casi no es usado por los estudiantes.
Los cambios en el reglamento aplican baja en los estudiantes que deban una materia por más de un año, y facilita que la actual directora mueva sus piezas en cargos clave del IPN. También desaparecen la baja temporal y endurecen el poder de los directivos para sancionar a los estudiantes que incurran en actos que afecten "el buen orden" del plantel, sin especificar a qué se refiere, lo cual vulneraría la libertad de expresión.
Y además los estudiantes se quejan de que las cuotas que antes eran voluntarias ahora son obligatorias.
Adicionalmente, se autoriza a particulares explotar los espacios físicos de los planteles.
También se estabblece que se podrán realizar acciones para obtener ingresos adicionales a los que da la federación, pero no especifican si esas actividades tendrán ingerencia en las unidades de aprendizaje o modificarán el plan de estudios.
En otras palabras lo que buscan los directivos del IPN es acercarlo a la privatización, lo cual se podría evitar simplemente si el gobierno federal le asignara más recursos.
Pero Enrique Peña Nieto no está asignando suficientes recursos para la educación superior.
El detalle es que el albazo se hizo a sabiendas de que los estudiantes protestarían y podrían causar una situación similar a la huelga de la UNAM en el sexenio de Zedillo.
Lo cual sugiere un plan deliberado por parte del gobierno priista no sólo para privatizar al IPN, sino para causar una desestabilización en la Ciudad de México y así poder hacer golpeteo contra los estudiantes y contra Miguel Ángel Mancera en vísperas de las elecciones de 2015.
Si los estudiantes protestan y los porros del PRI causan violencia, los medios plegados al PRI harán golpeteo contra los estudiantes.
Si la policía del DF no hace nada para parar desmanes, los medios se le echarán encima a Mancera.
Y si la policía del DF frena los desmanes, pero por error le pega a quien no era porro, o detiene a alguien sin justificación, el golpeteo será de la izquierda contra el PRD y le restará votos que se irían a MORENA y le ayudaría al PRI a ganar más posiciones en el DF.
Tanto los estudiantes como el GDF deben ser cautelosos en la manera en la que manejan esta situación, porque si cualquiera de los dos comete un error, tanto los estudiantes como el GDF saldrán perjudicados, mientras que el beneficiado será el PRI.
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