Hay un detalle que se debe comentar:
Al margen del ofensivo contraste entre 1938 y 2014, si la privatización del sector energético es tan maravilloso para el País, como dicen los priistas, ¿entonces por qué no salió NADIE a NINGUNA plaza pública a festejar y a mostrar su apoyo por la medida?
Pues porque hasta los priistas repudian la reforma energética. Por eso casi 60% de los mexicanos rechazan que privados y extranjeros entren en el sector energético.
Ninguna reforma, ni medida tomada por los gobiernos federales en México han sido exitosas sin el respaldo de la gente. Por eso los mexicanos echarán abajo la reforma energética con la consulta energética de 2015. Y si les niega la SCJN la consulta, le darán voto de castigo al PRI en 2015 y en 2018.
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