De acuerdo con Reforma, la reducción se establece en los Criterios Generales de Política Económica que forman parte del paquete económico entregado al Congreso ayer por el titular de Hacienda, Luis Videgaray.
Esto quiere decir que el gobierno federal priista de Enrique Peña Nieto ve menos crecimiento en 2015 del que esperaba con todo y reformas y aeropuerto.
Peor aún, el 3.7% de crecimiento para 2015 nisiquiera es definitivo, ya que, admitió Hacienda, aún existen riesgos para la economía mexicana, por lo cual el crecimiento podría ser menor.
Entre los riesgos se establecen un menor dinamismo de la economía de Estados Unidos; debilidad en la economía mundial; volatilidad en los mercados financieros internacionales y una mayor tensión de los conflictos de Medio Oriente y Ucrania.
Además, el gobierno de Peña Nieto se niega a reducir el PIB de 2014 a menos de 2.7% a pesar de que diversas instituciones financieras y expertos, incluyendo el Banco de México, no ven un crecimiento mayor a 2.3% y posiblemente menos.
Cabe señalar que en diciembre de 2013 especialistas consultados por el Banco de México estimaban un PIB de 3.4% para 2014, pero al final la cifra se ha tenido que reducir a menos de 2.7%.
De repetirse el mismo patrón en 2015, el PIB en realidad crecería en realidad menos de 3%.
HABRÁ MENOS PRODUCCIÓN PETROLERA
Por si fuera poco, Hacienda espera una caída en la producción de petróleo a pesar de la reforma energética.
El gobierno priista pretendió justificar la caída en la producción debido a que se encontró "un aumento importante y atípico en la presencia de agua en la producción de crudo."
Por lo cual, el gobierno priista espera que Pemex produzca 2.4 millones de barriles diarios en 2015, con lo cual la producción bajaría pese a la reforma energética.
Cabe señalar que la economía mexicana se sigue deteriorando desde que Enrique Peña Nieto llegó al poder.
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