De acuerdo con Reforma, el sector asegurador calcula que el costo de los daños causados en Baja California Sur por el paso del huracán Odile podrían superar el costo de los daños causados el año pasado por los huracanes Ingrid y Manuel, los cuales ascendieron a 12 mil millones de pesos.
Esto sin contar las pérdidas que se generarán por la rapiña y la violencia que está causando la rapiña en Los Cabos, donde personas se pelean hasta con empleados armados de tiendas que buscan evitar saqueos de acuerdo con Reforma.
Pero de acuerdo con el titular de Hacienda, Luis Videgaray, el reto en Baja California Sur es "logístico."
Que porque en el gobierno federal hay fondos de desastre.
El detalle es que Videgaray sólo se refiere a la infraestructura pública; electricidad, carreteras, arepuerto, etc.
Pero los hoteles y viviendas de Los Cabos tienen daños que probablemente no se podrán reparar en un año, y para los cuales quien sabe y les acance con el dinero de las aseguranzas, ya que sólo pagan una parte.
Según Videgaray habrá estímulos para el sector privado, pero ¿cómo va a estimularse el sector privado si tiene 12 mil millones de pesos en daños?
Vamos, el propio Videgaray declaró que "no se tienen cuantificados los daños", y que también hay daños importantes en colonias populares.
Por otro lado, hay que recordar que hasta la fecha no se ha terminado de reconstruir Guerrero tras el paso de Manuel e Ingrid.
Lo cual indica que en Los Cabos habrá también un serio problema económico, ya que varios hoteles no estarán operando y, por ende, habrá una importante caída en la actividad económica.
Pero Peña Nieto y Videgaray pretenden despilfarrar dinero en un aeropuerto en Texcoco a pesar de que donde de verdad se necesita el dinero es en Los Cabos.
Lo cual quiere decir, como lo dijimos ayer, que la prioridad para Peña Nieto no es ni los mexicanos, ni las afectaciones a la economía, sino gastar en su imagen.
¿Quieren impedirlo? Ya no voten ni por el PRI ni por el PAN.
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