La reforma energética no sólo no bajará el precio de la luz y del gas, sino que en el largo plazo representaría un crecimiento mediocre del PIB de apenas 1.5%.
Lo anterior fue dado a conocer por el Instituto Mexicano de Ejecutivos en Finanzas. De acuerdo con una nota de Notimex publicada ayer, el IMEF declaró que la consecuencia inmediata de la reforma energética no será la baja en los precios de la electricidad y el gas.
Además, el impacto de la reforma energética en el largo plazo para el PIB apenas sería de 1.5% a 2% adicionales.
Actualmente el PIB anual de México es de 1.1%, lo cual es considerado como mediocre en el mejor de los casos.
Inclusive la proyección de alrededor de 2.3% de crecimiento del PIB que se tiene actualmente es considerada como pírrica.
A pesar de eso, el ex candidato presidencial priista, Enrique Peña Nieto, alegó en un programa de Televisa que con la reforma energética la economía mexicana crecerá 5% en 2018, lo cual no ha sido avalado por ningún especialista en finanzas.
Lo peor del caso es que el IMEF declaró que las grandes oportunidades no serán para los mexicanos por baja de precios del gas y la luz, sino para las empresas.
El problema es que los salarios en México son tan bajos que el beneficiar a las empresas no se traduce en un beneficio para los mexicanos.
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