Pemex no aumentará su producción con la reforma energética, sino que producirá exactamente lo mismo que antes; 2.5 millones de barriles diarios, pero además perderá renta petrolera, por lo cual equivaldrá a perder producción.
Lo anterior lo dio a conocer ayer la secretaría de Energía del gobierno federal priista de Enrique Peña Nieto durante la presentación de los resultados de la llamada ronda cero, que es la asignación de campos petroleros a explotar por Pemex luego de la aprobación de la reforma energética.
Ésto debido a que Pemex terminará asociándose con privados para explotar la mayor parte de los campos con reservas probadas de petróleo, por lo cual tendrá que pagar 50% de la renta petrolera o más a los privados con los que se asocie, o entregarles el 50% o más del petróleo en especie, por lo cual México sólo aprovecharía una producción equivalente al 1.25 millones de barriles diarios de petróleo, la baja más fuerte en la producción de Pemex en décadas.
Tal y como lo advirtió Andrés Manuel López Obrador, el petróleo no está en aguas profundas, sino en aguas someras, ya que Pemex se asignó principalmente cuencas en aguas someras, campos terrestre, algunas áreas de Chicontepec, algunas regiones de recursos no convencionales y algunas de aguas profundas.
Peor: al final Pemex sí tenía capacidad técnica y económica para aguas profundas, por lo cual no era necesaria la entrada de privados.
En total, Pemex obtuvo el 80% de las zonas que solicitó en Veracruz y el Sureste, que es donde realmente hay petróleo.
Además, obtuvo el 83% de las reservas probadas, por lo cual las empresas privadas, lo cual significa que Pemex pudo haber explotado la totalidad de las reservas sin necesidad de privados, los cuales explotarían el 17% restante.
El problema es que los privados se quedarían con más del 50% del petrólo o de la renta petrolera que encuentren, por lo cual el beneficio adicional para México sería de un máximo de 250 mil barriles de petróleo diarios.
Pero si consideramos que Pemex contrata a privados para extracción de todos modos, la pérdida de ingreso al tener que pagarles podría significar un equivalente a un aumento nulo de la producción de petróleo. Es decir, México seguiría exactamente igual que sin la reforma energética, pero regalándole petróleo y dinero a trasnacionales.
En otras palabras, el aumento en la producción sería tan pequeño que Pemex lo pudo haber hecho sin privados.
Esto contradice por completo la promesa del PRI de aumentar la producción de petróleo en México a 3 millones de barriles diarios, ya que al sumar las pérdidas de petróleo y de renta petrolera, Pemex termina con menos, no con más provecho de la producción petrolera.
El beneficio sólo será para las trasnacionales, ya que se llevarían por lo menos midio millón de barriles de petróleo diario, o su equivalente en renta petrolera, sin darle a México ningún beneficio.
Cabe recordar que aún es posible revertir la reforma energética votando en contra de la reforma en la consulta popular de 2015.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario