De acuerdo con Reforma, en comparecencia ante diputados federales el subsecretario de ingresos, Miguel Messmacher, admitió no hay un porcentaje preciso de cuánta renta petrolera deben entregar las empresas privadas a México bajo los esquemas de utilidad y producción compartida permitidos por la reforma energética.
Lo más que pudo decir el gobierno de Peña Nieto fue que la cantidad de dinero que le corresponderá a México dependerá del tipo de contrato.
En otras palabras, la reforma energética está diseñada para que las trasnacionales se lleven lo que quieran, puesto que legalmente no hay un porcentaje específico que se le deba dar a México.
Aún así, el gobierno priista mintió, ya que alegó que el funcionario priista alegó que "la lógica es que aseguremos que toda la renta petrolera siga siendo recibida por el Estado mexicano, y de hecho la lógica es que incluso, lejos de perder renta petrolera, se esté aumentando e incrementando de manera importante la renta petrolera que recibe el Estado mexicano."
Pero cuando le preguntaron qué porcentaje le iba a tocar a México, nisiquiera pudo el gobierno de Peña Nieto dar una cifra.
La mentira del gobierno priista de Peña Nieto es doble. Primero porque dice que habrá más renta petrolera cuando la reforma es para darle la renta petrolera a los privados.
Y segundo, porque nisiquiera hay una ley que obligue a las trasnacionales a darle más renta petrolera al Estado.
Esto ya lo hemos demostrado hasta el cansancio en blogdeizquierda.com pero vale la pena reiterarlo:
1. Peña Nieto alega que con la reforma energética la producción de petróleo aumentará de 2.5 millones de barriles diarios a 3 millones de barriles diarios. Un incremento de 40%.
2. Sin embargo, a las trasnacionales que lo extraigan se les tendrá que dar por lo menos entre 30% y 50% o más de la renta petrolero o del petróleo en sí (actualmente la ley permite darles 20% de la renta petrolera ya que se les paga a los privados que extraen para Pemex alrededor de 20 dólares por barril).
3. Eso quiere decir que en términos del dinero con el que se queda México o quedaría igual que antes, o perdería la renta de 1 millón de barriles de petróleo diarios. En ambos casos, la diferencia es que las trasnacionales estarían saqueando el petróleo de México sin que México reciba ningún benenficio.
Ah, y el insulto final; que dice el PRI que no se permitirá la consolidación fiscal en los contratos de Pemex. Lo cual es una tomada de pelo ya que la consolidación fiscal no es sobre contratos, sino sobre ingresos de empresas en conjunto.
Es quiere decir que una vez que una empresa controladora y sus filiales reciban el 50% de la renta petrolera, podrán usar la consolidación fiscal para no pagar ISR como empresas, no por los contratos.
Otro más; que dice el PRI que "el contratista que gane la licitación será aquel que diga que está dispuesto a ofrecer la mayor utilidad para el Estado, el mayor porcentaje de producción para el Estado."
Pero eso es un insulto a la inteligencia, ya que si las empresas que compitan por un contrato le dicen a Pemex que lo más que le pueden dar es 20 centavos de cada peso de renta petrolera, entonces México pierde 80 centavos por cada peso.
Por eso precisamente es que quieren los priistas que se apruebe la privatización de Pemex durante el mundial. Porque saben que la mayoría de mexicanos no quieren que el PRIAN los robe con la reforma energética.
PD: Que Peña Nieto fue a ofrecer
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