Quien quiera tener una licitación para una nueva cadena de televisión en México, de las dos que se licitarán, tendrá que pagar como mínimo 830 millones de pesos y sólo podrá tener 8.5% del mercado hasta dentro de 4 años de que inicie operaciones.
De acuerdo con Reforma, el IFT estableció que el precio para tener una licitación nacional de TV que pueda competir contra Televisa y TV Azteca es de 830 millones de pesos, cuando a Televisa no le costó nada.
Por si fuera poco, quien quiera tener una cadena de TV tendrá que pagar adicionalmente una garantía de 415 millones de pesos.
Pero eso no es lo peor. Todo ese dinero sólo garantiza tener el 8.5% del mercado a 4 de iniciar operaciones, y durante los primeros 20 años no tendría más de 8.5% del mercado.
Según el IFT, eso se debe a que el mercado tiene barreras significativas y altos niveles de concentración.
De acuerdo con Reforma, el IFT declaró que el porcentaje del mercado que tendría una nueva cadena de televisión sería el siguiente:
"Cero por ciento en el primer año; de 4.25 por ciento en el segundo; 7.23 por ciento en el tercero; 8.08 por ciento en el cuarto, y 8.5 por ciento a partir del cuarto año y hasta el término del periodo de vigencia (año 20) de la concesión", señala.
La verdadera razón, admitió sin darse cuenta el IFT, es por el duopolio de Televisa y TV Azteca. Dijo:
"Actualmente este mercado registra un alto nivel de concentración, ya que Grupo Televisa y Azteca en su conjunto concentran, directa o indirectamente, 95 por ciento de las concesiones, 90 por ciento de la audiencia y 99 por ciento de los ingresos por publicidad, asociados con la televisión abierta comercial."
Por consiguiente, sólo inversionistas como Carlos Slim podrían pagar por una nueva cadena de televisión, pero las leyes de telecomunicación le impiden competir contra Televisa.
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