El diario 24 Horas reveló que el gobierno federal priista de Enrique Peña Nieto sí dio contratos a Oceanografía. Esto ocurrió a pesar de que hay miles de demandas de trabajadores contra Oceanografía por pagos incumplidos.
Los contratos de Pemex a Oceanografía fueron otorgados entre diciembre de 2013 y enero de 2014 por el gobierno de Peña Nieto mediante la firma Petrodata, propieda de Maclovio Yáñez, tío de Amado Yáñez, dueño de Oceanografía.
Amado Yáñez, además, trabajó en la administración de Vicente Fox como subdirector de Pemex Exploración y Producción en la región norte, cuando Juan Bueno Torio, hoy diputado federal, era director de Pemex Refinación.
El primer contrato a Oceanografía por la administración de Peña Nieto se autorizó el 24 de diciembre pasado, para dar servicio integral de reacondicionamiento de pozos y adquisición de información en pozos de los activos de la región norte.
El contrato segundo se firmó el 13 de enero de 2014 para optimizar la productividad de los pozos del activo de protección de aceite terciario del golfo y otros de la región norte.
Los dos contratos fueron para operar en la región petrolera de Poza Rica, Veracruz.
Ricardo Monreal, diputado federal, asegura que los contratos fueron otorgados en proceso manipulados para que ganara Yáñez Mondragón.
Pero eso no es todo. Ayer Reforma publicó que trabajadores de Oceanografía han interpuesto de 2 mil a 3 mil demandas contra la empresa por adeudos de sueldos y otras percepciones.
Las demandas, denunció Luis Manuel Bartola, supervisor de buceo de Oceanografía, no han procedido debido a un contubernio entre la Junta de Conciliación y Arbitraje y la Procuraduría Federal de la Defensa del Trabajo con Oceanografía.
Es decir, los trabajadores de Oceanografía han demandado miles de veces a la empresa y el propio gobierno federal lo sabía, pero aún así le otorgó contratos.
Peor: el propio gobierno de Peña Nieto impide que prosperen las demandas de los trabajadores. Dijo Bartola:
"Quieres meter una demanda y no te escuchan, osea te ponen muchos obstáculos, están en contubernio con la misma empresa. Sabemos que están compradas esas personas que trabajan para el Gobierno federal".
La pregunta sigue entonces en el aire: ¿Cuántas empresas más hay como Oceanografía a las que no están tocando pero les van a entregar el petróleo debido a la reforma energética que privatiza Pemex?
Por lo cual insisto: el caso Oceanografía parece más un chivo expiatorio para que parezca que se está combatiendo la corrupción cuando en realidad al PRI y al gobierno de Peñan Nieto no les interesa combatir la corrupción, ya que ha sido el propio gobierno priista de Peña Nieto quien ha permitido irregularidades de Oceanografía, pero dejó de hacerlo hasta que el afectado por las irregularidades no fue un trabajador, sino el banco trasnacional Citigroup.
Por eso no debe permitirse que opere la reforma energética en México.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario