domingo, 16 de marzo de 2014

Dice ASF que hubo fallas de supervisión en L12, pero ese no es el problema

Por Victor Hernández

Reforma publica hoy que la Auditoría Superior de la Federación detectó en 2012 que el Proyecto Metro DF, encargado de la construcción de la Línea 12, no supervisó correctamente la ejecución de obras de la susodicha línea.

Lo que Reforma no dice es que lo que dijo la ASF tiene poco o nada que ver con las fallas que se detectaron en la L12, forzando el cierre de estaciones.

Mire usted:

Según el reporte de la ASF número 09-A-09000-04-0554, se encontraron deficiencias en el control y seguimiento de los trabajos realizados por el consorcio ICA-Alstrom-Carso en lo que se refiere a la calidad de los trabajos ejecutados por el consorcio. Tampoco se dio seguimiento a pruebas de laboratorio.

En otras palabras, las fallas forzosamente tendrían que ser pagadas por IVA-Alstrom-Carso en caso de ser esa la causa del cierre. Se tendría que sancionar tal vez a quien no supervisió bien dentro del Proycto Metro DF.

También dice que no hubo comunicación entre la supervisión externa y la residencia de la obra, ni se cumplió con el manejo de bitácoras, por lo cual se omitió llevar el seguimiento y resolución de la problemática planteada respecto al inicio de los trabajos, dijo la ASF.

Eso lo que sugiere es que hubo problemas en la construcción de la obra pero no se supervisaron adecuadamente.

De nuevo: si es el caso, entonces ICA tiene la responsabilidad de reparar lo que hizo mal.

Pero falta una pregunta importante ¿De qué problemas estamos hablando como resultado de la supuesta falta de supervisión?

Cito textual de Reforma:

Entre los problemas que enlistó estuvieron fallas en la fijación de tuercas y armado de concreto que ancla columnas metálicas, así como filtraciones de agua, entre otras.

Pero las fallas por las cuales se cerraron 11 estaciones de la L12 no son por la fijación de tuercas ni por el armado del concreto, sino por una discrepancia entre las vías y las ruedas de los trenes que causó desgaste prematuro tanto a las vías como a las ruedas. Las tuercas y el concreto de las columnas no tenían nada que ver.

Lo cual quiere decir que la nota de Reforma sirve para hacer amarillismo, pero no tiene en realidad relación con las fallas que causaron el cierre de estaciones.

Esto hace suponer que Reforma lo que busca es ver cómo hacer más grande de lo que es el asunto del Metro cuando en realidad es muy sencillo: si hubo fallas en la construcción que causaron el desgaste de las vías y de las ruedas de los trenes, las empresas que construyeron la L12 tendrán que pagar por las reparaciones.

Pero el dictamen del origen de las fallas no se sabrá hasta después del lunes, por lo cual estar tratando de hacerla a la bola de cristal -como al parecer está haciendo Reforma- no resuelva nada ni muestra el verdadero problema. Eso sí: hace grilla y amarillismo.

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