El lunes pasado la presidenta del PAN, Cecilia Romero, rechazó de plano la ley secundaria de telecomunicaciones enviada por Enrique Peña Nieto al congreso por considerar que vulnera a la reforma constitucional, quitándole atribuciones al IFT, etc.
Pero ayer, legisladores del bando de Gustavo Madero y del de Felipe Calderón de plano se deslindaron de lo que dijo Romero y dijeron que primero van a analizar la iniciativa.
Los calderonistas se fueron más lejos. Javier Lozano de plano abiertamente apoyó la reforma que beneficia a Televisa. Luis Alberto Villarreal y Jorge Luis Preciado no se fueron tal lejos, pero lo que sí dejaron claro es que no le van a hacer el feo.
Eso quiere decir simple y sencillamente que los dos bandos están tratando de quedar bien con Televisa y con Peña Nieto para que no los ataquen ahora que habrá elecciones internas.
En otras palabras, los panistas se doblaron ante Peña Nieto por la reforma de telecomunicaciones.
El ganón será Gustavo Madero, ya que tendrá garantizada la continuidad del respaldo de Peña Nieto para seguir en la dirigencia del partido.
Ernesto Cordero, por su parte, por mucho que trate de hacerle la barba a Televisa y a Peña Nieto, no le va a quitar el apoyo a Madero debido a que Peña Nieto sabe que si Madero se le cae, entonces tendrá al PAN en contra. Sobra decir que no le conviene eso a Peña Nieto ni por asomo.
Así que técnicamenet al apoyar la ley secundaria de telecomunicaciones tal cual, los calderonistas le están ayudando a Madero.
Otro tiro más en el pie que se da cordero. Mensos que son los calderonistas, pues.
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