El gobierno delegacional panista de Benito Juárez, cuyo jefe delegacional es Jorge Romero, pretendió matar a decenas de perros y gatos del refugio de animales ubicado en la esquina de La Morena y Xochicalco, en la Colonia Narvarte, clausurándolo sin justificación.
Fue el 22 de enero pasado cuando los subordinados de Romero se aparecieron en el refugio alegando que había una queja vecinal contra el refugio, lo cual es inverosímil ya que el refigio había operado durante años sin que ningún vecino se quejara.
Por ese motivo, los subordinados de Romero pretendieron cerrar las puertas del refugio con todo los animales adentro, lo cual hubiera causado su muerte al no poder salir del lugar ni poder ser alimentados.
Fue gracias a que Protección Civil se opuso a que se cerraran las puertas que la gente de Romero no las cerró, pero aún así le causó un enorme daño a la comunidad de Narvarte, ya que el refugio ofrecía servicios de esterilización y consultas veterinarias a bajo costo, así como adopción de mascotas que de otra manera tendrían que vivir en la calle, en constante peligro de agresión, enfermedades y desnutrición.
El refugio da hogar a animales que fueron abandonados o que vivían en situación de calle, dándole comida y atención veterinaria. Para este propósito, el refugio solicitaba donativos de alimento para mascotas y entre semana hacía ventas de garage, con ropa usada y artículos varios de segunda mano. No era un negocio puesto que los que trabajaban ahí son todos voluntarios. Por lo cual tampoco se les podía acusar de violar el uso de suelo. Simplemente no era un comercio.
Era también el lugar donde la gente que había perdido a su mascota acudía a poner anuncios con la esperanza de encontrar a sus mascotas.
Hace un par de meses una cuenta anónima en Twitter empezó a hacer una campaña de guerra sucia contra el refugio con la intención específica de dar pretexto para que fuera clausurado.
Desde el principio, la cuenta anónima causó la sospecha de que en realidad se trataba de gente de Romero tratando de fabricar un pretexto para poder clausurar el refugio y extorsionarles dinero.
Ahora, el refugio tiene que pagar más de 70 mil pesos de multa para poder ofrecer servicios de veterinario a bajo costo y dar nuevamente a las mascotas en adopción, lo cual ha abonado a la sospecha de que en realidad lo que buscaba el gobierno panista era dinero.
Cabe señalar que mientras que el refugio de mascotas fue clausurado, los puestos de ambulantes de avenida Universidad, en el WalMart, siguen operando y no han sido tocados a pesar de que Romero alegó que actuaría contra los ambulantes.
A título personal
Lisa (naranja) y Lucy (blanco y negro). |
A título personal, el autor de este texto puede dar fe de la utilidad y servicio a la comunidad del refugio de Narvarte. En 2011, un adopté en ese refugio a mi gatita Lucy, quien hace compañía a mi otra gatita, Lisa. Las dos se volvieron hermanas, algo que es difícil que ocurra entre gatos que no son de la misma camada. Adicionalmente, he promovido la adopción de mascotas en ese refugio entre los lectores de blogdeizquierda.com, por lo cual hago un llamado a los lectores a reclamarle a Jorge Romero, por medio de la cuenta de Twitter @JorgeRoHe, y a exigir a la diputada del Distrito XVII, Dinorah Pizano (@dinorah_pizano) que intervenga para que se deje de hostigar al refugio de animales y los esté pretendiendo extorsionar la delegación cuando JAMÁS había ocurrido queja alguna. Al contrario. El refugio ofrecía a los vecinos de Narvarte convivir con los animales sacándolos a pasear los fines de semana para que no estuvieran todo el tiempo encerrados. Hoy eso ya no es posible a causa de la miseria humana de Jorge Romero.
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