Le preguntaron ayer a Marcelo Ebrard, luego de ir al informe de actividades de Manuel Granados, sobre la posibilidad de que el PRI gane en el DF. Ebrard lo descartó en base a encuestas.
"Ves las encuestas y el PRI está muy por debajo. Dudo que lo pueda hacer en el corto plazo", dijo Ebrard.
Y lo cual contradice a los detractores de Miguel Ángel Mancera en la ultraizquierda, quienes alegan que por culpa de Mancera el PRI va a ganar en el DF.
Pero las encuestas -y Ebrard las conoce bien- dicen otra cosa.
Y si dicen otra cosa, entonces toda la pateleta y berrinche que ha hecho la ultraizquierda contra Mancera no pasa de eso: de simple pataleta y berrinche.
Irónicamente, donde el PRD sí está perdiendo terreno, dijo Ebrard, es en los Estados, menciona
ndo específicamente a Veracruz y Tlaxcala, donde la izquierda rechaza a la dirigencia de Nueva Izquierda.
Por eso, dijo Ebrard, es que al interior del PRD no quieren elecciones para renovar la dirigencia. Porque saben que la gente rechazaría al delfín de Jesús Zambrano, Carlos Navarrete.
Irónico, eso sí, que varios detractores de Mancera nisiquiera son del DF, sino precisamente de los estados donde la izquierda cada vez pierde más terreno ante el PRI.
Pero en el DF el PRI de plano ya no la hizo. A menos de que MORENA divida el voto en 4 delegaciones donde sí podrían perderse por la división del voto. Pero en el resto del DF el PRI no pasará.
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