La Coparmex admitió ayer que las reformas estructurales, entre las cuales están la reforma energética y la fiscal, no son la solución definitiva para los problemas del país.
De acuerdo con El Universal, la Coparmex declaró que para que el país mejore debe aumentar la productividad, la cual es creada por la escacez de crédito eficiente, rigideces en el mercado laboral, y falta de competencia en mercados de energía y telecomunicaciones.
Sin embargo, todo lo anterior ya habría sido supuestamente corregido con las reformas de telecomunicaciones, laboral, energética y financiera.
Dice también que la baja calidad educativa y falta de vinculación escuela-empresa, insuficiente infraestructura, sobrerregulación económica y debilidades institucionales son causas.
Pero que las reformas -que incluyen a la reforma educativa- no son solución, y que sólo se podrá elevar la productividad armonizando la innovación, crear encadenamientos productivos y generar economías de escala.
Pero todo eso lo pudieron haber hecho los empresarios SIN reformas. Lo que pasa es que no quisieron.
Suena más bien a que quieren que se privatice más la educación, ya que todo lo demás ya lo tienen.
O bien, suen a que están admitiendo que las reformas no van a solucionar nada porque lo único que facilitan no es el crecimiento del país, sino el saqueo.
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