A Ernesto Cordero le sacaron una grabación en la cual dijo que Gustavo Madero y Luis Alberto Villarreal, coordinador del PAN en San Lázar, son unos "pinches ladrones."
Cordero se quejó y dijo que era resultado de espionaje, lo cual técnicamente es una admisión de que la grabación sí es veraz.
Tres cosas al respecto:
1. Cuando AMLO se quejó del origen de los videos de Carlos Ahumada, los panistas dijeron que lo importante no era el origen. Obvio: el origen era Fernández de Cevallos y Salinas. ¿Ahora sí les importa?
2. Cuando Cordero estaba peleándole a Josefina Vázquez Mota la candidatura del PAN para la presidencia en 2012, a Josefina, curiosamente, le sacaron una grabación claramente producto del espionaje en la cual se refería a la entonces vocera de Felipe Calderón, Alejandra Sota, como la "pinche Sota." Y Cordero nunca se quejó. Obvio: el golpe a Josefina le beneficiaba.
3. En vez de estar diciendo que la grabación es producto del espionaje, mejor que diga por qué le dijo a Madero y a Villarreal "pinches ladrones". Porque el tema de la conversación era el asunto de los moches.
Ah, y al margen de que si es espionaje o no, el hecho es que en el PAN se siguen haciendo pedazos entre calderonistas y maderistas, lo cual garantiza grandes derrotas para ese partido en 2015 y 2018. La contienda será PRI contra Izquierda.
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