El PRIAN está por consumar el mayor atraco al país al aprobar la privatización del petróleo con la reforma energética.
El PRD ya colectó suficientes firmas para pedir una consulta vinculatoria contra la reforma energética en 2015. De llevarse a cabo, la mayoría de los mexicanos votarían por echarla abajo.
Pero ahora el PRI pretende impedir la consulta alegando que no se puede hacer una consulta sobre temas de ingresos y gastos del gobierno.
El argumento del PRI es falso e irrisorio, ya que no se está consultando sobre cómo gasta y gana dinero el Estado, sino cómo se lleva a cabo la explotación de los recursos energéticos.
El organismo que decide la consulta es el IFE, por lo cual es el IFE el que determinaría si la consulta energética se apega al artículo 35 constitucional, que establece el derecho a la consulta, o no.
Desde luego que se apega, pero por consigna el IFE es capaz de decir que no.
La decisión sería entonces impugnada ante la SCJN, la cual decidiría en definitiva si se puede hacer la consulta o no.
En estricto apego a la ley, la SCJN debe declarar que sí se puede hacer la consulta. Pero si es por consigna del PRI, dirá que no se puede.
Así que si la SCJN rechaza que se haga la consulta, entonces la izquierda no tendrá de otra: tendrá, primero que, ofrecer como plataforma de campaña en 2018 la segunda expropiación petrolera.
Y para lograrlo, tendrá que poner no al candidato que más posibilidad tena de ganar las elecciones.
Ahí no podrá haber pendejadistas de "ese no, nomás el que yo digo." De quien sea; de MORENA o del PRD. Se tendrá que elegir a quien mayor posibilidad tenga de ganar en las encuestas y punto. Sea Andrés Manuel López Obrador o Marcelo Ebrard o quien alcance mayor popularidad en 2017. Se llame como se llame. Si no lo hacen, será imposible ganar la elección y por ende será imposible recuperar la riqueza nacional.
Y OJO: Le sugiero al PRD empezar desde ahora a decirlo abiertamente. Si el PRIAN privatiza Pemex, se pedirá consulta. Y si no la respetan, se hará la segunda expropiación petrolera de ganar las elecciones de 2018.
Porque si el PRD hace esa advertencia, las trasnacionales tendrán que pensarla dos veces para invertir en el atraco que representa la reforma energética.
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