En entrevista radiofónica, Madero declaró:
"Si tienes que escoger, te quedas con las (reformas) que son constitucionales y las que van a brindar por transitorio las secundarias, a meter una secundaria y poner en riesgo una constitucional".
La reforma de telecomunicaciones estableció un plazo de seis meses para aprobar sus leyes secundarias. El plazo vence el 9 de diciembre, pero el PAN se niega a retomarla con tal de aprobar la reforma energética de Enrique Peña Nieto que privatiza Pemex.
Sin embargo, al no aprobar las leyes secundarias, señala Reforma, se aplazan las decisiones de inversión en el sector de telecomunicaciones, lo cual, a su vez, frena la competencia.
Según Madero, lo que está en riesgo es que no haya una reforma político-electoral constitucional y que no se pueda privatizar Pemex.
Cabe señalar que el rechazo ciudadano a la privatización de Pemex es de más del 60% de los mexicanos, por lo cual el privatizar Pemex en 2014 o 2015 equivaldría a perder votos tanto para el PAN como para el PRI, por lo cual quieren que la privatización se haga en las próximas dos semanas, antes de que termine el periodo de sesiones del Congreso.
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