Qué mal se vieron ayer los panistas en la Cámara de Diputados sacatoneándole a decirle sus verdades a Enrique Peña Nieto.
Luego de que un diputado del PRI les dijera "lacayos de la Coparmex" y afirmara que Felipe Calderón es un alcohólico (lo dijo con todas sus letras) un sólo diputado del PAN lo más que se atrevió a decir fue esto:
"Para hablar de rumores, es como si yo me subiera a Tribuna y empezara a hablar de los rumores que rodean la vida personal del Presidente Peña Nieto. Le voy a decir una cosa, diputado Díaz Palacios, aquí nosotros también estamos y vamos a estar para defender a cualquier militante del PAN. Aquí nos va a encontrar."
¿Y ya? ¿Eso fue todo su fulminante revire?
¡CHES PUYEYES!
¡Carajo! SEAN HOMBRES. Díganle sus netas a Peña Nieto: que no supo decirle a Jorge Ramos de qué murió su esposa; que su ex amante lo acusa de no atender a su hijo fuera del matrimonio; que no sabe ni leer el teleprompter; que hizo fraude comprando votos en 2012; que su policía violó mujeres y mató a un joven e San Salvador Atenco; que es un títere de Salinas y de Televisa; y que todos lo pendejean en Twitter.
Ay ay, "para hablar de rumores es como si yo dijera que tú la trais y yo le corro, ay chus turruntuntún."
Si fueran hombrecitos los panistas ya estarían diciéndole eso y más a Peña Nieto. ¿Se acuerdan cómo ganó Fox en 2000? Bueno, aparte de usando dinero ilegal en su campaña de los Amigos de Fox. En efecto: diciéndole "mariqueta" y "Lavestida" a Francisco Labastida.
No estoy diciendo que incurran en homofobia contra Peña Nieto, pero ustedes me entienden. Se trata de tirar netas, decir la verdad y no de andar de modosito. No ser sacatón, pues.
No van a ganar elecciones de todos modos porque el país está harto de ustedes, pero por lo menos, si lo hicieran, no parecerían los lacayos no de la COPARMEX, sino del PRI que ahora parecen.
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